El problema más grave del Instituto Mexicano del Seguro Social son las personas de la tercera edad, reconocido por el propio director general, Mikel Arriola Peñaloza. La atención a los viejitos es el dolor de cabeza al que la única salida que le encuentran es subvencionar este servicio, para aquellos enfermos que padecen males crónicos-degenerativos.

Son los pacientes que ocupan camas y servicios durante meses o semanas. A esos adultos mayores no los quieren. Son los que generan mayor presión a las finanzas que implican el 80 por ciento del gasto total y que se incrementa un cinco por ciento cada año.

La gente de más de 60 años son la pesadilla para los dirigentes del IMSS.

Mikel Arriola afirma: “No podemos seguir así, porque no va a haber unidades médicas que nos aguante una población enferma a los 50 años y que siga con padecimientos hasta los 80 y 85 años que es la edad de esperanza de vida que se espera en el 2050”.

No son bien vistos los enfermos con diabetes, hipertensión, cáncer y daños cardiovasculares. En 1943, la gente se moría a los 48 años.

Las personas se morían jóvenes. Ahora es diferente con el aumento del promedio de vida. “Las presiones del Instituto incrementan el gasto a ritmos superiores al ingreso”.

El director general del IMSS quiere dejar a su paso una huella diferente y un peculiar sello de cambio.

Por el lado de los jóvenes no hay problemas, lo más serio es que se han duplicado en los últimos diez años el número de partos. Las adolescentes mexicanas son las nuevas madres de esta generación.

Por otro lado, tratan de reducir la tramitología en materia de incapacidades, pensiones y subsidios. Se planean medidas económicas que pudieran afectar estas especiales prestaciones. En el IMSS se pueden jubilar a las mujeres con 27 años de servicio y a los hombres con 28 sin importar la edad. Aunado a un aguinaldo de 40 días y vacaciones de un mes.

El IMSS cuenta con 430 mil personas trabajando en diversas áreas para esa dependencia y de las 500 mil consultas que se brindan al día, 370 mil es para los individuos de la tercera edad.

Mikel Arriola es licenciado en Derecho de la Universidad Anáhuac de la ciudad de México y maestro de la London School o Economics de Inglaterra, la misma donde becó hace más de cuarenta años el entonces presidente Luis Echeverría a Fidel Herrera Beltrán. Una escuela británica por donde han pasado varios cientos de estudiantes mexicanos. Se supone que es para egresados de la carrera de Economía, pero los abogados dedicados a políticos quieren conocer algo sobre lo que es administración pública. El fraudulento manejo del dinero de los impuestos.

Los ingleses, en su gran mayoría los adultos de mayor edad, son los que votaron para que su país se saliera de la Unión Europea y con ello sacar a los inmigrantes de las zonas en conflicto del Medio Oriente a los que tenían el compromiso de recibir y proteger, con esta actitud asumen ciertos rasgos de índole discriminativa.

Son los que votarían con los ojos cerrados por Donald Trump.