Lo más importante de los resultados del proceso electoral en el estado de Veracruz será la integración del nuevo Congreso local. Al fin se convertirá en el trascendente papel que le corresponde como el poder legislativo.

El verdadero cambio que se requería y que servirá de equilibrio en la forma del estilo de gobernar. Ningún partido político tendrá mayoría que permitirá que se reflejen las diversas corrientes políticas que existen en la entidad.

El otro cambio es la desaparición de partidos políticos sin representación entre la ciudadanía que solo servían de buenos negocios para sus dirigentes quienes en el curso de los comicios se rentaban por elevadas sumas de dinero a candidatos de los llamados partidos mayoritarios.

Otro aspecto a destacar es que el próximo gobernante debe tener presente que solo uno de cada cinco veracruzanos votó por su persona. Con el fin de que no pierda el piso, solo la quinta parte de la población lo apoyó.

Perdió el mejor

Así es la política en Veracruz, la mayoría del pueblo quería que terminara la hegemonía del PRI en el gobierno estatal, ese fue el motivo para que ganara aquel candidato que ofreciera cumplir con ese propósito electoral y que castigara a los autores materiales del desbarajuste financiero. Más de ocho décadas de un solo partido político en el poder. Lo equivocado de este tema comicial es que el mejor candidato era precisamente el que abanderaba el partido tricolor.

Por muchos motivos, capacidad, talento, sensibilidad política y el estilo de gobernar, Héctor Yunes Landa, era el gobernador que más convenía a los veracruzanos, pero el cambio y la pesada loza del mal gobierno de Duarte de Ochoa, fue causa principal de que el mejor perdiera y el electorado votó para terminar con el viejo y corrupto priismo.

Se votó en contra del PRI.

En el quehacer político es fácil perder el piso. Atribuirse logros y éxitos que no están acordes a la realidad. El Partido Acción Nacional se atribuye el papel del salvador de México y como solución política para la próxima elección presidencial al lograr triunfar en varias gubernaturas.

La gente votó en contra del PRI y con ello se benefició al PAN, porque no había otro partido, no le quedaba al pueblo otra alternativa más que los mojigatos azules de la derecha. EL PRD había desaparecido del panorama electoral y Morena era su primera incursión en un proceso estatal.

De acuerdo a la distorsionada visión triunfalista ellos obtendrían la Presidencia de la República en el 2018, confiados en gubernaturas panistas y que el pueblo no tiene memoria para olvidar las nefastas administraciones de Vicente Fox y Felipe Calderón. Este último quien iniciara la guerra en contra del narcotráfico que ha costado varios cientos de miles de crímenes de gente inocente y el arranque de la era de violencia que se vive a lo largo del país y que desapareciera la seguridad de las familias mexicanas.