Hay que entender a base de consultar a los expertos de que no puede contaminarse lo político con lo económico y menos en los tiempos electorales.

Y que ante la problemática mundial de la baja en los precios del petróleo, se viene encima una situación caótica en todo el orbe, en donde, principalmente en Estados Unidos, se prepara para el presente año la más fuerte deportación masiva de indocumentados que afectará en mayor proporción a los connacionales que no encontraran trabajo y menos la posibilidad de subsistir en su país de origen acorde al sueño americano que pudieron disfrutar a base un esfuerzo sobre humano.

Los que saben, consideran que en el vecino país del norte se contempla abrir espacios laborales a sus propios ciudadanos a fin de darles oportunidad de encontrar una solución al problema de desempleo que se contempla vendrá como consecuencia de la crisis petrolera mundial y reviviendo los años de la recesión de los primeros años de la siglo veinte. (Las Uvas de la Ira un libro escrito por John Steinbeck, en la década de los años treinta, durante el siglo XX, el mundo se enfrentó a una de las peores crisis económicas que ha tenido: el crack de Wall Street. Esto provocó una época conocida como la Depresión y Estados Unidos sufrió uno de sus momentos más crueles.
El país norteamericano no sólo tuvo que enfrentarse al descalabro económico más grave de su historia, sino que además vivió un fuerte desastre natural llamado Dust Bowl. Esto generó un éxodo de campesinos y agricultores expropiados por todo el país, que buscaban fortuna y medios para comer, recibiendo sólo negativas.
Ante esta tragedia, en todo el país se desarrolló una cultura de la depresión. Los artistas e intelectuales hablaban del tema, el cine contaba historias de héroes que se levantaban ante la tragedia, y también, el pueblo estadounidense inició un examen de su estilo de vida.

En este contexto, el joven John Steinbeck escribía su segunda novela como reacción a la dura situación socioeconómica. Steinbeck conocía la vida de privaciones en carne propia por haber sido bracero y campesino. Con esta experiencia y con una sincera conciencia social, el escritor produce este testimonio de la crisis que vivió su país en aquellos años de desesperación).

Dice el viejo adagio muy socorrido en estos lares que cuando la perra es brava hasta los de la casa muerde, y esto viene a colación por quienes en aras de un periodismo crítico andan pregonando basados en la incongruencia falaz y utópica que todo en el país está mal, cuando desde las ideologías izquierdistas estiran la mano para comer como de la derecha.

Por eso hay que esperar a las medidas que se adoptaran para favorecer al empleo en el país, por lo que deberán venir con el sacrificio de quienes obtienen elevadísimos salarios en el sector oficial federal y por supuesto con los amplios beneficios a la iniciativa privada ý a los inversionistas extranjeros para la creación de nuevas fuentes de empleo en todo el territorio nacional.

Lo político con lo económico y los problemas mundiales, nada tienen que ver con el desprestigio de los partidos políticos que ahora se debaten con el tema de que las elecciones las ganan los candidatos independientes, y aquí si hay tema de debate, los que son abanderados por las causas sociales, populares y de todos los sectores de la sociedad civil pueden tener amplias posibilidades de lograr algo en cualquiera de las entidades en donde se disputaran las gubernaturas este año.

Los analistas que saben del tema político, no pierden de vista que en el estado de Veracruz, la situación está más que definida a favor del PRI, porque aquí el voto duro, tiene memoria, y es que está fundamentado en que en el PAN han equivocado el rumbo al manejar como franquicias las candidaturas en tiempos del joven dirigente Ricardo Anaya y por lo mismo un partido dividido y ya hasta fraccionado, con todo y las alianzas maléficas no le dan para enfrentarse a la fortaleza del voto priista.

Pero en caso de que los electores decidieran no votar por el PRI, a juicio de los expertos, estarían decidiendo su voto por algunos de los candidatos independientes, y aquí no hay que perder de vista a Juan Bueno Torio y a Gerardo Buganza Salmerón, dos ex panistas que han salido del partido al que le dieron todo y después recibieron la clásica patada.

Pero la política va más allá cuando desde las propias filas del panismo, dictaminan que en el estado de Veracruz la alianza del PAN y el PRD, no sólo no dará resultados favorables sino que tendrán el voto en contra, por algo simple y sencillo, nunca se han podido unir el agua con el aceite, por el momento esa alquimia es anti-natura.

La solidaridad de la prensa veracruzana consternada y dolida por el sensible fallecimiento de nuestro colega y amigo Raymundo Zúñiga Ortiz, quien convalecía de una enfermedad que no le impidió ejerce su labor de comunicador hasta su aliento en un claro ejemplo de ética y profesionalismo.

Su esposa la también colega Reyna León, sus hijos y familiares han recibido el consuelo y las palabras de un sentido pesar por este momento que pone también de luto a la prensa de Veracruz.

Raymundo se significó como un hombre serio y entregado al periodismo con una limpieza y transparencia recocida por propios y extraños y sus compañeros del gremio, a los que nunca les negó una sonrisa y palabras de aliento.

La Prensa Unida de Veracruz, como decía el extinto, profesor Alfonso Valencia Ríos, le rinde hoy al amigo y compañero Ray, todo un homenaje a su impecable trabajo en los medios de comunicación, por lo que su recuerdo permanecerá en todos los que tuvieron la grata fortuna de tratarle y conocerle como un ser humano excepcional. Descanse en paz. Así las cosas.