Lo que son las ironías, mientras en Veracruz puerto
en el distrito XII, Anilú Ingram no pudo alzarse con
la victoria, -las causas ya son sabidas de sobra-, en el
distrito de Los Tuxtlas, uno de sus impulsores políticos,
quien siempre ha procurado a la diputada local con
licencia, Vicente Benítez González lograba sacar a
flote la que parecía, complicada candidatura de otro
candidato, Jorge Carvallo Delfín.
Por un lado, Anilú en quien siempre el Oficial Mayor
ha depositado su respaldo, y la ha recomendado
para sacarla adelante a los diferentes actores de la
conurbación, y por otro, hizo lo propio con quien fuera
secretario de Desarrollo Social, pero para nada a fin
a su grupo político o a sus proyectos, en el distrito por
el que fue electo el de Lerdo de Tejada.
Como es sabido la disputa entre ambos por ir a encabezar
la elección para diputado federal en ese distrito
fue una lucha encarnizada al interior del gabinete.
Finalmente el titular de Sedesol se fue de abanderado y
el Oficial Mayor encomendado por el jefe de la instituciones,
Javier Duarte de Ochoa para sacarlo adelante.
Qué forma tan hábil del mandatario veracruzano
de amarrar a los dos incompatibles duartistas. Y finalmente
los dos priistas contentos, aunque el que parece
colgarse la medalla es el funcionario educativo. Tal
parece que así lo confirma la concurrida pachanga por
su cumpleaños que tuvo lugar en la finca Agaltepec
en Catemaco, donde cientos de políticos de todas las
corrientes, sectores y grupos se dieron cita.
Quizá porque saben lo que representa el Oficial
Mayor en los afectos del gobernador, pero también
mucho por méritos propios, y con ello dio un repaso
de convocatoria a los que se dicen amos y señores de
la política en el distrito Los Tuxtlas y el mismo estado
de Veracruz.
Secretarios y subsecretarios como Tomás Ruiz, Juan
Manuel Velázquez, Ramón Ferrari, y Gabriel De Antes;
líderes de partidos como Alfredo Ferrari Saavedra,
PRI, y Juan René Chiunti, PANAL, así como otros
funcionarios y políticos, Marcelo Montiel, Ricardo
García Guzmán, Ricardo García Escalante, Nemesio
Domínguez, Denisse Uscanga, Octavio Pérez, y Gladis
Merlín. Los diputados federales electos, Edgar Spinoso
y Erick Lagos Herrnández, también pasaron lista de
presentes.
Se sumaron al festín los alcaldes de Catemaco, y
San Andrés Tuxtla, Jorge González Azamar y Manuel
Rosendo Pelayo, así como los de Lerdo de Tejada, Chacaltianguis,
Lerdo de Tejada, Hueyapan de Ocampo,
Juchique de Ferrer, Lerdo de Tejada, así como líderes
magisteriales al por mayor.
La finca de casi 8 mil metros cuadrados en el natural
y bello escenario de Catemaco parecía no ser suficiente.
Ni quien las narices asomó al evento fue el ex diputado
federal electo, Jorge Carvallo Delfin pudo
haber agradecido más con su presencia que con su
ausencia, aún cuando se sabe perfectamente que no
es del círculo político de Vicente Benitez ni hay grado
alguno de empatía. Pero sí una forma de ser recíproco
por el trabajo que se hizo para sacar su candidatura.
La soberbia imperó.
Antes de iniciar las elecciones no solo se hizo un
pacto de no agresión entre ambos, sino el responsable
de sacar el distrito se dedicó a demostrar quien tiene el
pulso y quien lleva la voz cantante en Los Tuxtlas. Los
políticos se unieron en torno al festejo de su onomástico
pero más que nada fue un hervidero de grilla, o más
bien un grillero tuxtleco que se diseminó rápidamente
por todo el estado.
La gran ausente, precisamente su amiga y candidata
fallida en el distrito Veracruz, Anilú Ingram, quien seguramente
no quiso estar en un ambiente bullanguero
y de grilla para hablar de las traiciones de las que fue
objeto, e inevitablemente de su derrota.
MUY EN CORTO
LEYTON RECUPERA FINANZAS DE KURI. El
que al parecer quedó gastado luego de su campaña a
diputado federal fue el hoy legislador electo por Orizaba
Fidel Kuri Grajales, pero quien negoció en una
muy buena cantidad al defensa goleador del pasado
torneo, Leyton Jiménez.
El naturalizado mexicano fue vendido en compra
definitiva del Club Veracruz a los Xolos de Tijuana pese
a que el presidente Fidel Kuri Mustieles había jurado
que no saldría del plantel por haber sido un jugador
clave en la temporada pasada.
Pero evidentemente el dueño de la franquicia es
quien más sabe del tema de finanzas es el jefe de la
familia y al joven no le quedó de otra más que apechugar
y recordar que donde “manda capitán no gobierna
marinero”.
Sus razones habrá tenido el empresario futbolero,
hoy diputado, pues evidentemente le costó mucho
esfuerzo y dinero su triunfo sobre el panista Daniel
Zairick, quien comenzó punteando las encuestas al
inicio de la campaña.
Para poder revertir esa desventaja Kuri Grajales
tuvo que echar “toda la carne al asador” ya que como
aquí consignamos en su momento no era el candidato
del alcalde de pluviosilla, Juan Manuel Diez Francos.
Tampoco fue de los candidatos prósperos porque
es sabido que nunca ha tenido buena relación con el
mandatario Javier Duarte y más bien el llamado “Tiburón
Mayor” construyó su candidatura en el CEN del
PRI donde respetaron que las encuestas lo favorecían
en la contienda interna.
Así que solamente Fidel Kuri sabe lo que le costó
ganar y se sabe que es bueno para los negocios ya que
hay que recordar cómo le vendió a Jorge Vergara, dueño
en de las Chivas, a Angel Reyna en casi 7 mdd.
Ahora pudo haber obtenido algo similar por Leyton
ya que había que sacar a flote las finanzas personales
tras la sufrida campaña electoral, pero veremos si no
es a costa de un buen papel del equipo que cada vez
enamora más a los porteños futboleros.
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