Veracruz no era parte de los focos rojos que a nivel nacional se han prendido por el proceso electoral de este domingo. Figuran Oaxaca, Jalisco y Michoacán, pero la entidad estaba fuera de peligro.
Quizá aun pueda estarlo. Pero lo ocurrido en Boca del Río, el distrito que se le ha dado en llamar la joya de la corona, por la rivalidad histórica de personajes en el poder lo acercan a la lista negra, el fidelismo que ostenta y se mantiene en el gobierno estatal, y se puede decir que el poder de provincia, el distrito de Boca, en manos de yunismo encarecen el escenario.
De esta forma, el robo de boletas electorales en un domicilio de Boca del Río, prende la alerta. Se produce con violencia y uso de armas de fuego para obtener ese valioso “botín”. El capacitador del INE a quien hurtaron el material electoral ha renunciado por falta de garantías.
En este distrito de Boca o Veracruz-rural se producen estos hechos cuando el flamante subsecretario de Gobierno, Marlon Ramírez, que de política electoral sabe lo que de astronomía, expresara que el estado está en paz y absoluta calma.
Hoy, hay que voltear obligadamente a esta demarcación, donde por un lado compite Carolina Gudiño apadrinada por el exgobernador Fidel Herrera a través del partido Verde Ecologista-PRI, y por otro Paco Gutiérrez de Velasco con Miguel Ángel Yunes Linares atrás de su candidatura.
Los enconados pleitos, y el antagonismo puro de estos dos políticos, cabezas de corrientes, no deben trasladar sus intereses personales a la elección del próximo domingo y afectar a terceros, en este caso los votantes, o desencadenar hechos de violencia en los que la población civil resulte lastimada. Va entonces, un llamado a la civilidad y a la paz social. En otros terrenos pueden despedazarse pero sin tocar las fibras de la gente que nada quiere incluso, saber de quien es el ganador en esa contienda.
Y es que tras los hechos donde fue amagado por sujetos armados en su domicilio, el capacitador del Instituto Nacional Electoral (INE) que le robaron las boletas presentó su renuncia porque el órgano electoral se negó a brindarle medidas de protección.
Peor aún se queja que el INE dio a conocer que además fue puesto en riesgo al hacer pública su identidad en voz del vocal de la Junta local del INE, Antonio Ignacio Manjarrez.
A su vez, el representante del PRI en el Distrito IV, Reynaldo Escobar Pérez le puso más sal a la herida. Al señalar que sus sospechas están dirigidas al Ayuntamiento de Boca del Río en el robo de esa papelería electoral.
“Sí, sospecho de las autoridades municipales, del PAN, del Presidente Municipal, del Secretario del Ayuntamiento, del responsable de las autoridades municipales por la falta de colaboración con las autoridades federales para presentar estos comicios y una tendencia para favorecer a Acción Nacional”.
Reynaldo como siempre. De lengua me como un taco. Mejor que haga valer su “fabricada” imagen de excelente jurista y no hablar a la ligera.

MUY EN CORTO
CAMBIOS EN WTC. Finalmente al exasesor de Comunicación Social, Carlos Acevedo se reincorpora para seguir en el gobierno próspero luego de que el coordinador Juan Octavio Pavón Gonzalez no quiso tenerlo en su staff por aquello de que no es gente de su confianza.
Así que lo mandaron a Boca del Río específicamente a las relaciones públicas del WTC a donde removieron a la ex diputada federal por el PRD, Socorro Aubry Orozco.
Y aunque dicho funcionario que aspiraba a otro encargo de mayor envergadura, al final de cuentas no le quedó de otra donde seguramente habrá de aplicar toda su expediente en este puesto. Próximamente se harán otros movimientos.

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