“Beto Silva puede cambiar tu vida” y convertirla en un infierno
• Su lema de campaña no pudo ser más oportuno
Magda Zayas Muñoz @magzamu
“Alberto (Beto) Silva puede cambiar tu vida”, reza así su lema de campaña como candidato a diputado federal por el distrito 3 con cabecera en Tuxpan ¡y sí efectivamente, el ex alcalde de Tuxpan y ex coordinador de comunicación social del Gobierno del Estado, te puede cambiarnos la vida y transformarla en un infierno! por ejemplo puede encarcelarte o si bien te va puede dejarte sin empleo, porque es un hombre intolerante, soberbio y sin escrúpulos.
Y si eres periodista te puede ir peor, porque si realizas una crítica de su trabajo que le incomoda, entonces llama a la redacción y pide que te corran o amenaza con mandarte a golpear y en el peor de los casos te encarcela en complicidad con funcionarios del estado, porque abusa de la amistad que le une con el Gobernador Javier Duarte de Ochoa, y así fabricando delitos y pruebas, Alberto Silva ha cambiado la vida de algunos periodistas a los que ha dejado caer todo su odio y su rencor.
Seguramente “el cisne” como también se le conoce, está consciente de que la vida es un Karma o una rueda de la fortuna y que lo que hizo a esos seres humanos –a quienes no conforme con llevarlos a prisión los mando a golpear y a amenazar dentro del penal- tarde o temprano se le regresará, así es que no puede aún cantar victoria, no puede presumir de ser un extraordinario ser humano –lo dicen los propios agraviados- porque él sabe el daño que ha causado en su paso por la política.
Así es que no hay duda alguna de que Silva puede cambiar tu vida, es más su lema de campaña no pudo ser más acertado, no pudo tener mejor cabida para describir su personalidad y de lo que es capaz el señor candidato que presumen ser un simple cordero, cuando cegado por la cerrazón y la soberbia gira instrucciones para causar daño, haciendo uso de las facilidades que le otorga el gozar y abusar del afecto del Gobernador Javier Duarte de Ochoa.
Pero el propio Gobernador sabe que, Beto no le ha favorecido como siempre lo prometió y que siendo Coordinador de Comunicación Social le ofreció dar un giro a la dependencia, lo cual no logró cumplir- cometiendo serios errores que le costaron la crítica, la mofa y el escarnio nacional en redes sociales.
El personaje en función se dedicó a alimentar su ego, a cuidar su imagen, a hacer uso del recurso público para cuidar su imagen y no la del Gobernador, tan es así que cuando algún columnista o periodista lo criticaba no titubea en amenazar que si no le bajaban o corrían al crítico en turno entonces no pagaría los convenios respectivos.
El señor Silva sabe de lo que habló en estas líneas y más aún esta cierto de la veracidad de lo que ocurre, pero antes que enmendar sus errores y corregir el rumbo, para acercarse a quienes ha lastimado y ha encarcelado, lo más que su cerebro le permitirá realizar será lanzar una amenaza para que, quien esto escribe, se quede sin empleo o en bien fabricará un delito para encarcelar como él estila.
Dos periodistas y un empresario, son los mejores testigos de que Silva puede convertir tu vida en un infierno. Los comunicadores acusados de extorsión por el hoy candidato a la diputación federal fueron Jorge Manrique, reportero de medios digitales, Alejandro de la O, conductor radiofónico e Isaías Armenta, empresario de Alianza Empresarial; Carlos Antonio Ortiz productor de una radiodifusora y otros más la libraron porque se acaban de retirar del lugar donde Beto mandó un sequito de ministeriales a detenerlos y posteriormente incomunicarlos.
El ex coordinador de Comunicación Social del estado, Alberto Silva Ramos, negó que durante su gestión como alcalde de Tuxpan hubiera encarcelado a periodistas, sino que, justificó, lo único que hizo fue denunciar un acto ilícito, al ser víctima de extorsión por parte de unos comunicadores.
Beto Silva denunció que los comunicadores pretendían sacarle una cantidad millonaria –acusación que nunca pudo probar- para no revelar fotografías personales y no difundir un reportaje que afectaba –según él- su imagen. El hoy candidato se retractó en muchas ocasiones y negó fabricar culpables, se limitó a victimizarse y a señalar que denunció un delito que fue castigado, así de frívolo y peligroso el hombre que busca un escaño en el Congreso de la Unión ¡así es que electores del distrito 3, ustedes tiene la última palabra!.