Las mismas caras y mañas en las candidaturas a diputaciones federales del PRI

@magzamu

Hablar de Elizabeth Morales García, es hablar del tercer género en la política militante contemporánea, de la capital del estado de Veracruz, de esa característica de buscar el poder sin importar a quien derribar y traicionar. De conductora de programas de televisión donde aparecía como la madrina amable que repartía juguetes y enseres domésticos a los precaristas de Xalapa, paso a ser la benefactora de quienes habitan en los cinturones de miserias en las colonias de la capital del estado, necesitados de prótesis como muletas, andaderas, sillas de rueda y otras provisiones para personas discapacitadas.

Las toneladas de juguetes y cobijas repartidas por Elizabeth Morales en los meses de diciembre y enero de hace 10 años para acá, han salido de las arcas del gobierno estatal, gobiernos municipales y empresarios que apoyaron una causa justa que se volvió perversa para conseguir los votos en los procesos electorales donde la hábil conductora y recién renunciada Presidenta del PRI estatal, figuró como mujer de gran corazón solidaria, con necesidades sociales, cuando lo único que hacía era quedar bien con sombrero ajeno.
Elizabeth Morales García tiene a su favor, el mérito de haber salido de un hogar humilde, en donde a lado de sus padres y hermanos, constituían una familia típicamente xalapeña, emprendedora y de lucha para obtener la preparación académica, al mismo tiempo que los ingresos suficientes para sufragar los gastos de sobrevivencia del núcleo familiar.

Con solo tres cargos públicos, dos de elección popular y uno de designación partidista, logró convertirse en un personaje ampliamente conocido en la entidad veracruzana y en sectores priistas del distrito federal puesto que al haber desempeñado el cargo de diputada federal por Xalapa y presidenta de la Comisión del Deporte de la Cámara y posteriormente la presidencia municipal de Xalapa y a su salida la presidencia del PRI Estatal, su falta de discreción mostró la trasformación de Elizabeth para convertirse en una mujer ambiciosa, de bajas pasiones, inclinada a amasar fortunas y a invertir en giros negros de los que presume entre sus amistades.

Hoy la modesta aspirante a diputada, de hace 10 años, se le ve como magnate de los negocios negros y ostenta una riqueza insultante como la que han mostrado algunos integrantes de la nueva clase política del PRI nacional a quienes poco importa la distribución equitativa de los recursos públicos.

Con obra pública de mala calidad y encarecida por los diezmos cobrados por Elizabeth Morales y su sequito de colaboradoras que incrustó en el ayuntamiento de Xalapa, más obras publicas cobradas sin haber sido ejecutadas, además de un saqueo que se estima en más de 100 millones de pesos de CMAS –el organismo operador del agua potable- hoy el nuevo PRI pretende enviar a la conquista por segunda vez de la diputación federal por Xalapa Urbano a la ex alcaldesa.

Por lo que se mira, dicha ex presidenta cuenta con el respaldo de personalidades del viejo PRI como María de los Ángeles Moreno quien lleva casi 30 años saltando de la cámara de senadores a la cámara de diputados y a la asamblea legislativa del distrito federal, rotativamente hasta acumular 3 décadas de succionar el presupuesto del poder legislativo, así mismo cuenta con el apoyo de Beatriz Paredes Rangel, ex diputada, ex senadora, ex gobernadora de Tlaxcala, ex Secretaria de la Reforma Agraria, ex Presidenta del PRI Nacional y actual embajadora en Brasil, quienes al lado de Enrique Jackson, Delegado plenipotenciario del CEN DEL PRI en Veracruz, impulsan a Elizabeth para que logre cumplir sus ambiciones políticas y económicas en la capital veracruzana.

Hay una larga lista de auditorías y revisiones de obra pública ´practicadas al ayuntamiento de Xalapa y al organismo operador del agua potable CMAS que delatan los malos manejos presupuestales, los desvíos de recursos y el acaparamiento de una riqueza que Elizabeth y sus cercanas y cercanos no pueden ocultar, mansiones en los más caros fraccionamientos del desarrollo habitacional Las Animas de Xalapa Veracruz, donde ellas y sus colaboradoras compraron cuando menos 10 residencias entre 8 y 10 millones de pesos cada una.

Casas de campo de Morales García en el municipio conurbado a Xalapa, de Emiliano Zapata y en el municipio de las cuatro veces heroico Veracruz, Puebla y el Distrito Federal. De todo lo narrado, daremos cuenta pormenorizada porque lo proviene o tiene relación con el servicio público debe hacerse público para que lo conozca la sociedad en su conjunto.