Entre los mayores contrastes de nuestra sociedad se encuentra el potencial económico de un país y el rezago en términos de pobreza y oportunidades de vida que viven guardan millones de mexicanos.
La Cruzada Nacional contra el Hambre es una estrategia de política social, integral y participativa que promueve el gobierno federal para lograr avances en materia de pobreza extrema alimentaria -que requiere una atención urgente- de la que Veracruz no se escapa.
En 2014 la Sedesol, en conjunto con autoridades estatales y municipales, trabajan para lograr atender a 5.5 millones de mexicanos en pobreza extrema de alimentación que representan el 78.4 por ciento de la población objetivo, cifra que resulta por demás alarmante.
Según datos oficiales, el 21.6 por ciento de la población de Xalapa enfrenta carencias de tipo alimentario por diversas circunstancias, lo que puede ser un demérito de sus capacidades personales de desarrollo y nivel de vida.
En torno a ello, existe en Xalapa un propósito de mejorar las condiciones de vida, atendiendo las necesidades básicas especialmente de los sectores sociales con mayor vulnerabilidad por situaciones de pobreza.
Hay un conjunto de acontecimientos en el que sensibilidad del joven alcalde xalapeño, se conjuga con la solidaridad social y la colaboración de valiosas instituciones nacionales como es el ejército mexicano para aterrizar la ayuda que se propone el Programa asistencial “Sin Hambre”, mediante la instalación de los comedores comunitarios que en la capital veracruzana empiezan a multiplicarse y a ser una realidad en las colonias populares.
En la colonia El Naranjal ya se cuenta con un nuevo Comedor Comunitario, donde con el trabajo voluntario de un comité de vecinos y el apoyo del Ayuntamiento xalapeño se beneficia a toda la comunidad, pero principalmente a los niños a quienes les permite acceder a una comida balanceada.
Hace apenas unas semanas el alcalde Américo Zúñiga anunció la conformación de 19 comedores comunitarios en toda la demarcación municipal y pronto se dio a la tarea de hacerlos realidad; a finales del mes de julio se instaló el primero en la colonia Unión y muchas más personas están a la espera de iniciar sus beneficios.
Américo Zúñiga ha dicho que ya que no se trata solamente de sumar kilómetros de obra pública o de millonarias inversiones de recursos públicos, se trata de que todo ello se sume para conseguir los satisfactores sociales que den calidad de vida a los xalapeños. El alcalde ha dicho que “en Xalapa también se está moviendo a México”, como una manera de sumar a los programas federales.
Apenas el martes, Zúñiga Martínez realizó la apertura de la calle Xalapeños Ilustres en el centro de la ciudad, que fue rehabilitada con 3 mil 399 metros cuadrados de concreto hidráulico, puesto que ya presentaba gran deterioro. Se repusieron 56 metros cuadrados de banqueta y 56 metros cuadrados de guarniciones. En lo que va de la administración suman ya 45 obras.

Los abusos del subdirector de comercio
Ya que hablamos del Ayuntamiento y del tema de la pobreza alimentaria, es justo señalar la imprudencia y soberbia del funcionario del ayuntamiento de Xalapa que desentona con el desempeño del alcalde y es que ayer se atrevió a justificar el robo y abuso de autoridad que comenten sus empleados.
Me refiero al flamante subdirector de Comercio del Ayuntamiento de Xalapa, Alberto Romero Gutiérrez, quien aseguró que sus inspectores no cometieron abuso de autoridad al retirar del centro de la ciudad a un vendedor de manzanas, violentarlo psicológicamente y despojarlo de su producto, humillarlo y burlarse de él, en un trato por demás violatorio de sus derechos humanos.
El funcionario de tercer nivel, se atrevió a justificar la conducta de sus subordinados, señalando que se cumple con el Reglamento de Comercio, pero habrá que recordarle que por encima de cualquier reglamento está la Constitución Política y los propios códigos que además de prohibir la discriminación y garantizar el respeto a la dignidad humana de las persona, dando un trato igualitario, también sancionan el abuso de autoridad que cometen dichos empleados, que durante el día despojan a humildes comerciantes de su producto.
Comerciantes -que lejos de sus acusaciones dolosas- se ganan la vida honestamente y que además no ocupan espacio alguno en la vía pública, ya que su venta consiste en deambular; van por todo el centro con productos en mano tratando de ganarse unos pesos honestamente para tener qué comer o llevar algo a sus hogares.
Mientras que sus empleados abusivamente no solo los sancionan, sino que los despojan de su producto de manera humillante y ofensiva. Dice el señor que no son xalapeños ¿se le olvida al funcionario el libre tránsito que garantiza la constitución?
Tan solo por poner ejemplo. Pero más aún se le olvidan los derechos humanos de la persona. ¡No señor subdirector, su actitud y la de sus colaboradores es por demás abusiva!
La ciudadanía que se ha mostrado indignada por lo ocurrido hace unos días -cuando su personal despojo de unas manzanas a un joven que intentaba venderlas mientras deambulaba por el centro- confía en que Américo pondrá un alto, porque una cosa es cumplir con el reglamento y otra denigrar, humillar y despojar abusando del poder a quienes se ganan la vida honestamente ¡los prefieren robando!
El alcalde seguramente sabrá ponerle actuar y enderezar la corrupción que ejerce el subdirector de comercio, como lo ha venido haciendo desde inicio de su administración. No es justo que empleados empañen el buen trabajo de Américo Zúñiga.

@magzamu