Se trata del proyecto más importante de desarrollo que existe para la zona norte del estado de Veracruz, integrado por una alianza de doce municipios que confluyen en la laguna de Tamiahua, con el propósito de detonar por medio de una ambiciosa propuesta una evolución programada del desarrollo económico, rural y turístico, de una zona veracruzana que es tres veces más grande que el estado de Tlaxcala y ocho veces la ciudad de México.
Y no se trata de un proyecto burocrático de índole federal o estatal, sino simplemente el espíritu de entrega, pasión y trabajo de un grupo de personas que crearon una fundación, con el fin primario de motivar a una pequeña población para que participe en actividades mediante una ejecución directa de labores.
La laguna de Tamiahua es el corredor ecológico más importante del mundo de la migración de las aves.
Le tocó al Consejo Editorial del periódico IMAGEN, ser el primero en conocer este Plan Tamiahua, integrado por un grupo de ciudadanos con los más altos grados académicos, donde ninguno percibe salarios. Dicho plan opera bajo tres ejes básicos que lo integran que son: sociedad, medio ambiente y desarrollo, este último contempla los rubros de actividades económicas, salud, bienestar social, vivienda y educación.
Destacan las siguientes personas: Ana María Maldonado, Ricardo Pegueros, Juan Carlos Zamorano, César Becerra Ruiz y como director general Gustavo Adolfo Murrieta. El punto crucial fue el tema de educar a la población de aquella rica región, donde se ubica la tercera parte de las reservas petroleras del país.

LA IGLESIA VETÓ A PEÑA
Ahora, hasta los obispos de la Iglesia Católica se meten de lleno en las campañas presidenciales, resulta que al demandar el voto ciudadano el representante de San Cristóbal de las Casas, Felipe Arizmendi en nombre de la Asamblea del Episcopado Mexicano, exige a los ciudadanos mexicanos que antes de emitir su voto deben de tomar como prioritario conocer los diversos aspectos de la vida familiar y privada de los candidatos.
Que lo más importante para los votantes no debe ser ni la economía, ni la política, sino la familia del aspirante a la Presidencia de la República.
De golpe y porrazo los jerarcas de la Iglesia vetaron al priista Enrique Peña Nieto, le pusieron el remarcado tache, por los hijos fuera de matrimonio y toda la telenovela sobre la misteriosa muerte de su esposa.

LOS YUNES ROJOS Y AZULES
López Obrador que estuviera en el estado de Veracruz es muy diferente al del 2006, en cuanto a maduración política y visión electoral. Ya da entrevistas, busca debates, y sobre todo, les hace caso a sus asesores en imagen.
A estas alturas de las campañas presidenciales coinciden las casas encuestadoras que se encuentra en un empate técnico en relación con Josefina Vázquez Mota, con la salvedad de que la apabulla en cuanto a experiencias, conocedor de problemas, sencillez y liderazgo. En lo que están parejos el perredista con la panista es en honestidad, donde no tiene nada que hacer el priista Enrique Peña Nieto, es en ese renglón de limpieza económica. Ahí la riqueza del mexiquense es ofensiva. La residencia de súper lujo que posee en el campo de golf de Ixtapan de la Sal, es el sueño hecho realidad de los que encabezan la lista de los multimillonarios de la revista Forbes. Le va a costar trabajo vivir en Los Pinos.
Para que los números mejoren para AMLO tiene que hacer mayores cambios y deslindarse de los grupos radicales que tiene su partido en la entidad veracruzana, con la fama bien ganada de haber estado bien maiceados por el entonces gobernador Herrera Beltrán. El tabasqueño aún se encuentra a tiempo de hacer una gran campaña, se recuerda la frase que pronunció durante el desayuno con los empresarios, que fue la que más arrancó aplausos, cuando se refirió que el PRI y el PAN son lo mismo, ya lo ven aquí, en Veracruz, hay Yunes rojos y Yunes azules.