Que quede claro, el declarado enemigo del gobierno federal de Andrés López Obrador y del estatal con Cuitláhuac García Jiménez, es el Partido Acción Nacional, con sus figuras siniestras pertenecientes al PRI, quienes lo manipulan.

Desde que se creó el Frente del PAN, PRD y MC, el autor intelectual y artífice de este grupo fue el expresidente Carlos Salinas de Gortari, con la única tarea de impedir la llegada de López Obrador, asesorado por el excandidato presidencial Diego Fernández de Ceballos, --quien al final de su campaña se hizo a un lado--, para que llegara la nefasta mafia del poder.

El eficaz operador político de este grupo de partidos, fue el exgobernador Dante Delgado Rannauro, un hombre de ideales de la izquierda progresista. El alvaradeño con su poder de convencimiento manejó al entonces dirigente nacional del PAN, Ricardo Anaya y los desahuciados Chuchos del PRD.

A nivel nacional operaron entre otros políticos priistas, el exsecretario Miguel Ángel Osorio Chong, quien estaba ardido, porque no fuera tomado en cuenta por Enrique Peña Nieto.

A nivel estatal ocupa el primer lugar del grupo opositor, el exgobernador Miguel Ángel Yunes Linares, quien no pedía permiso para atacar al tabasqueño y con epítetos y ofensas, quería quedar bien con Salinas de Gortari y Delgado Rannauro. En el Senado siguen utilizando al exalcalde del puerto de Veracruz, Julen Rementería, por parte de este bloque político antinatura, quien se opone a la Guardia Nacional, cuando el legislador representante del Estado de Veracruz, no toma en cuenta que es una de las entidades de mayor inseguridad e índices de violencia y feminicidios.

El cambio en el PRI

Se avecina otra batalla en la dirigencia nacional del PRI, donde se apunta en primer lugar, el gobernador de Campeche, Alejandro Moreno. Cuenta con 22 de los 32 dirigentes estatales del partido tricolor.

Quedaron en el camino José Narro, Ivonne Ortega, Ulises Ruiz y como paradoja de lo que llaman ahora como “Primor” es el amigo de López Obrador.

La prensa “fifi” en contra de AMLO

 Los grandes consorcios periodísticos y de medios audiovisuales “sugieren” a sus articulistas y comentaristas criticar duramente la Cuarta Transformación que pretende hacer el presidente López Obrador. En algunos casos son razones ideológicas, pero en la mayoría son económicas.

No se escapa nadie de Morena y menos al presidente López Obrador que a estos articulistas como Leo Zuckermann y Jorge Fernández, de Excélsior, Loret de Mola y Paola Rojas, de Televisa y el Universal, y sigue la lista es muy grande…

A nivel local se entiende que los supuestos aliados de medios a Duarte de Ochoa que llegaron arreglos con Yunes Linares, tuvieron algunos la misma tarea de torpedear la llegada de Morena al Palacio de Gobierno. En la mayoría de los casos el oficio de periodista se ejerce sin banderas políticas porque perdería su pluralidad y autonomía.

En México  no existe una ley que regule las noticias falsas lo que permite que se atribuya a funcionarios de Morena y al presidente López Obrador palabras o hechos en los que no tenga ninguna relación. Estas Fake News, aún no se consideran como un atentado a la libertad de expresión.