Por Raúl López Gómez
Columna: Cosmovisión
Nacho Morales: filosofía de vida
2015-12-17 | 20:44:50
El distinguido abogado y notario público veracruzano, radicado en la ciudad de México, Ignacio Morales Lechuga, envía a todos sus paisanos su mensaje de navidad y año nuevo,

El maestro Morales Lechuga, goza de excelente salud y su espiritualidad crece cada día al cumplir con una filosofía de vida, trabajar y ayudar. Esa ha sido su premisa de siempre, del personaje autentico que no cambia sus valores y sus principios, y por el contrario con el tiempo su visión y alcances personales y profesionales crecen siempre investido de la energía que Dios concede a los grandes personajes que se hacen a base de un esfuerzo de superación personal y del deseo y compromiso de servir a los demás.

Nacho Morales, comparte sus horas con la exacta sincronía del mejor reloj del mundo que es el del amor a sus semejantes y del de vivir apegado al derecho y por ende a la legalidad como una de sus mayores premisas de abogado y de persona de bien. Por eso su agenda de trabajo empieza desde las primeras horas del día en su oficina de la notaria 116 de la ciudad de México, en donde cada mañana, su secretaria Rosita, le opera todo un programa de trabajo con gran rigurosidad en el manejo de los tiempos, los compromisos laborales, la cátedra en varias universidades, las conferencias, y la asistencia a los organismos en donde ofrece su participación de forma honoraria pero con la mayor responsabilidad y rigidez que lo constituyen en un hombre de seriedad extrema en todas sus actividades.

Como si se tratara del mejor director de orquesta, organiza con precisión todo el programa de la agenda de un día en donde, hay un tiempo especial para la atención de las llamadas de sus amigos en forma muy cariñosa y atenta.

Nacho en todos estos años, que se le conoce en una trayectoria profesional de casi cuarenta años de vida pública y profesional, jamás ha perdido el piso, por eso a su desarrollo personal y humano hay que agregarle dos aderezos importantes en su vida: sencillez y humildad.

El hombre director de una orquesta que por su capacidad innata y su visión de genio, le dan la posibilidad de trabajar y escuchar su música clásica preferida que le alimenta el espíritu, aun así en la inercia atiende las llamadas telefónicas y en forma inmediata pasa a dar lectura personal al protocolo de cada instrumento que pasa por su notaria, en la solemnidad del fedatario público que cumple a cabalidad con esa tarea a la que le ha dedica el mayor tiempo de su vida profesional.

Sus pensamientos son amplios, en primer término su esposa la señora Jacqueline Broc de Morales Lechuga, su amiga, compañera y más férrea critica, la voz que puede ser como la de su conciencia porque sé trata del más grande amor de su vida, a quién admira y respeta, la atención especial con la familia a los hijos y los nietos. A Sus colegas, compañeros y amigos, que son parten de su vida de muchos años, a los que procura y atiende como un apóstol de la amistad, como pocos.

Su dedicación a la cátedra, también se ha convertido en parte de un compromiso personal que atiende con esmero y mucha dedicación, porque disfruta el compartir conocimiento y experiencia con las futuras generaciones de abogados, en forma especial de su alma mater, la Escuela Libre de Derecho, de donde es egresado, es maestro y un gran rector, muy querido y respetado.

En el manejo de tiempo ocupacional le dedica gran parte a las tareas y acciones en el altruismo que para él ha sido sagrado, sin reflectores y sin ruido, en el sigilo y en el espíritu cristiano apoya a las grandes causas de este país con un apego a su vocación humanista ante todo, de ayudar a la gente a que alcance soluciones a temas de salud, educación, lucha en contra de las adicciones, desarrollo sustentable y la infraestructura general de hospitales y áreas torales que beneficien a los que menos tienen en materia de servicios públicos elementales.

En la fundación de la que forma parte “Gonzalo Rio Arronte”, pasaron por sus manos cantidades estratosféricas de recursos económicos que se han destinado únicamente al altruismo básico y elemental de este país. En donde se persigue un solo fin ayudar con un fin humano netamente, pero con base en el desprendimiento de lo propio ese el fundamento real y positivo.

Para el hombre como Ignacio Morales Lechuga, profesional del derecho que ha desempeñado los más importantes cargos públicos en su natal entidad Veracruz como secretario general de gobierno en tiempos del gobernador Agustín Acosta Lagunes y luego como fundador del primer Consejo Nacional de Seguridad en tiempos de Miguel de la Madrid y con el presidente Carlos Salinas de Gortari, procurador del DF, procurador general de la república y embajador de México en Francia, el servicio público lo desarrolla de tiempo completo con largas jornadas laborales.

En toda su vida acumula grandes reconocimientos de propios y extraños, preside organismos públicos y privados, Cada año recibe reconocimientos como algo nuevo impactante, innovador y gratificante para el ser humano. Este año lo fue el doctorado honoris causa de la Universidad Autónoma de Nuevo León, que vino hasta con el triunfo de su equipo con el campeonato en el futbol. Antes recibió la más grande distinción del gobierno de Francia a un extranjero, la medalla de la Legión de Honor. Y muchos reconocimientos en su tarea de abogado, notario y servidor público ejemplar, con varios record en su desempeño que aún permanecen en sus años como procurador del DF y en la PGR.

Lo más importante es que Ignacio Morales Lechuga, nunca odia ni tiene rencor con quienes le hacen o le quisieron hacer algún mal, como sucedió en 1998, cuando como un ciudadano de libre pensamiento convocó a una alianza de partidos políticos para ser gobernador del estado de Veracruz y recibió la traición del PRD.

Con amplias posibilidades de ganar una elección, pero que desde la fuerza del estado, le fue arrebatado el objetivo, después de que desde el gobierno estatal encabezado por Patricio Chirinos y su poderoso secretario de gobierno, Miguel Angel Yunes Linares, le quitaron esa posibilidad a base de intolerancia, fuerza y represión de forma vil y salvaje. Los hechos quedaron en la memoria colectiva, amenazas de muerte y atentados que no lo doblaron y de la derrota, sacó la mayor fuerza y fortaleza en su vida para reencauzarse en su actividd profesional y su labor altruista.

Nacho Morales, envía sus saludos con afecto al gobernador Javier Duarte, a Flavino Ríos, Secretario de gobierno y a todos sus paisanos a los que les desea lo mejor ahora y siempre.

También, cálidas expresiones de afecto para dos grandes del periodismo veracruzano, José Pablo Robles Martínez y Felipe Hakim, y a todos sus amigos de la prensa que son muchos.

Tiene el licenciado Morales Lechuga, invitación para venir a Veracruz a dar una conferencia sobre diversos tópicos en los meses de abril y mayo del 2016, lo convocan desde la FACICO de la UV, el doctor Francisco Blanco Calderón para hablar de su experiencia en la política y el servicio público, además está en estudio aún por definir su participación en otros foros veracruzanos de universidades privadas. Y además en primer término para tomar un café en la parroquia con sus amigos para recordar anécdotas y refrendar lazos de amistad a pesar del paso de los años..

El corazón de Nacho Morales, es tan grande que en él están siempre presentes todos sus paisanos. El personaje oriundo de Poza Rica, al que se le reconoce carácter fuerte con estricto apego al derecho y a la legalidad, en este momento nada le quita el sueño, por eso logra ante el paso de los años mantenerse activo y sereno, producente y consciente de que por su dinamismo todo esto le favorece, a quien no pierde jovialidad y la hilaridad del buen humor siempre a quien le gusta sonreír y disfrutar de la ironía fina en una buena charla con las clásicos cuentos chascarrillos veracruzanos.

Ante los problemas de la vida, en algunos momentos su mirada se pierde en el horizonte, a veces fría y en otras parece escudriñar fijamente y conocer el perfil de las personas para ver en su interior, pero más que nada, en aquellos momentos de introspección y reflexión, Nacho Morales, resuelve retos y adversidades siempre consultando al jefe de jefes a “Dios” ante todo y seguir adelante en el día a día, siempre como lo marca la naturaleza como si fuera el primero y el último día. Por eso, en su interior se dice asimismo para que enojarse, cuando el mejor remedio para los males es la risa.

Pero más aún, cuando se conoce como un buen psicólogo de la naturaleza humana y experto en este tema de que todo tiene un principio y un fin en el orden Universal. Para lograr la trascendencia, ante todo hay que ser feliz. Esa es la regla, luego entonces para que preocuparse del mañana hay que vivir el presente, levantarse temprano y ganarle horas al día. Descansar poco y trabajar mucho esa es la mejor medicina. Así las cosas

Nosotros | Publicidad | Suscripciones | Contacto

 

 

Reservados todos los derechos 2018

Nosotros | Publicidad | Suscripciones | Contacto

 

 

Reservados todos los derechos 2018