Lo que más atrajo a los militantes priistas con la llegada de Manlio Fabio Beltrones es la salida de César Camacho, el triste papel que realizara al frente del CEN del Institucional Revolucionario. Era urgente el cambio por las próximas elecciones donde se renovarán nueve gubernaturas y el partido se encuentra en plena picada.
Con el exgobernador mexiquense se perdieron tres gubernaturas y el panorama para el 2016 no podÃa ser más oscuro. Por lo pronto, la bufalada ya se lanzó y en estos dÃas estará lleno de oportunistas el edificio de Insurgentes.
HabÃa grandes dudas de que el grupo que rodea al presidente Peña Nieto le permitieran a Beltrones Rivera el arribo para presidir el PRI.
La tarea de que el partidazo recupere su posición de liderazgo nacional va a ser bastante difÃcil. De antemano tendrá que hacer muchos cambios.
Sin duda, el polÃtico sonorense que creciera al lado del veracruzano Fernando Gutiérrez Barrios, le dará otra imagen a ese partido polÃtico.
Es una persona respetuosa de la oposición y es un profundo conocedor del sistema.
En la última elección siete de cada diez ciudadanos no votaron por el partido tricolor. Con esos números el rechazo es evidente.
Es todo un paquete, como sacarse la rifa del tigre.
Revolución periodÃstica
Todo un cambio se registra en los medios periodÃsticos del mundo, por primera vez en su larga historia, The New York Times registra mayores ingresos por circulación que por publicidad.
Su portal digital superó la cifra de un millón de suscriptores. Sus clientes de la versión impresa tienen acceso a las noticias digitales.
El asalto de los diputados
Si el sueldo mensual de un diputados federal es de 73 mil 910 pesos y se supone que ahorran cada mes el 12 por ciento de sus emolumentos, es decir, 8,869.20; si lo multiplicamos por los 36 meses de labores, aunque los periodos normales son de solo tres dÃas de la semana, no se explica cómo se les da un bono de más de un millón de pesos al terminar su gestión.
Si realmente lo que guardaron en su caja fueron 319, 291.20 como triplicaron esos recursos, que salen de los impuestos de los ciudadanos.
Si realmente los legisladores son los representantes del pueblo, cómo es posible que existan estos desvÃos millonarios, cuando existen más de la mitad de la población sumida en la pobreza extrema.
No tienen la menor vergüenza de cobrar el próximo dÃa diez de agosto esa suma. Para entender porque son tan disputados los puestos legislativos reciben además de su sueldo, la suma de 76 mil pesos como compensación, bajo estos rubros: vales de despensa, atención ciudadana y asistencia legislativa.
Como parte proporcional del aguinaldo se les entregará la cantidad de 93 mil 669 pesos. Tienen su Navidad en agosto.
¿Se sentirán orgullosos estos legisladores federales cuando regresen a sus olvidados distritos?