Los temas mediáticos triviales siguen siendo hasta hora el mejor distractor de las acciones del gobierno del estado de Javier Duarte. Aquí lo recomendable es que los grupos políticos se esperaran a que se acerque el 2016 y también a las elecciones intermedias para que se genere un clima de unidad entre los priistas que al parecer sin guía y sin control, se van de un lado para otro, y también se entiende de una supuesta lucha entre duartistas contra fidelistas.

Este esquema de desgaste, es el que pone en peligro al PRI para el 2016 en estos lares, pero lo asombroso es que en cada político veracruzano se recupera el viejo adagio que hizo famoso el ex gobernador Fidel Herrera, entonces en su precampaña por la gubernatura de que en cada niño que nace en estas tierras se tiene un aspirante más al gobierno estatal por tratarse de la torta que trae bajo el brazo

Pero aquí, esta torta se complica y en un mundo en donde todos quieren y además con legitimidad aspiran, pero en la realidad sin posibilidades, ahora se ha desatado una caballada flaca que no tiene para cuando parar a la ola de ataques entre sí, pero principalmente en contra de los senadores priistas Héctor Yunes y José Yunes, a lo que no escapa el secretario de gobierno, Erick Lagos, que en últimos días está en la congeladora y ya ni se diga el propio Fidel Herrera.

Los expertos dicen, que para que el PRI conserve el poder del gobierno estatal, es indudable que se va a requerir de la experiencia en la operación policía del ex gobernador Fidel Herrera Beltrán, a quién le han soltado lobos y toda clase de perros de presa, que desde todas partes del poder estatal de algunos grupos, que ahora lo ven como a un enemigo, cuando antes fue el mentor, el tutor y guía formador de quienes se apresuran a deslindarse del experimentado político cuenqueño que vive su propio huracán.

En la sutileza de las cosas, no extraña que al priista Héctor Yunes Landa, considerado como el mejor y más altamente posicionado en las preferencias para ganar la gubernatura en el 2016 y que esta sólo unos puntos arriba de su pariente el panista Miguel Angel Yunes Linares, lo pretendan mediáticamente denostar y acabar con posturas falaces de que es amigo del político de Nopaltepec en una lamentable andanada de misiles del fuego amigo, que al senador sólo le siguen aumentado en sus bonos políticos.

La guerra en contra de Fidel Herrera y de Héctor Yunes, por parte de los grupos políticos en el poder estatal, no son sólo nada más que los síntomas de la preocupación de quienes no tienen ninguna posibilidad de lograr la anhelada candidatura priista al gobierno estatal en 2016.

El debilitamiento de algunos grupos tiene que ver con la certeza de que en las nulas posibilidades de obtener alguna posición con los Yunes Landa o Yunes Zorrilla, ahora los pretenden bajar a periodicazos en los altos niveles de las preferencias electorales en donde el famoso senador peroteño, no se descarta en esta e intensa carrera por la candidatura del PRI al gobierno del estado.

El estilo de golpeteo y de lucha a través de los medios de comunicación, tiene que ver con una forma ya conocida en estos lares en donde entrado el cuarto año del mandato del gobernador en turno se desatan todas las pasiones por la promoción de quienes tienen aspiraciones y otros de encargarse se atajarlas para que no crezcan y vayan de la mano de los tiempos políticos del gobernador en este caso Javier Duarte.

El formato es el mismo y se conoce, pero además de innecesario en esta ocasión los priistas es mejor que se unan y logren entre todos un pacto de civilidad y de una unidad que les fortalezca de mano del gobernador Duarte, para evitar la derrota que les quite la gubernatura en el 2016.

Los que no se bajan de la nube, los que se esconden en sus cómodas y cálidas oficinas sin la atención de los asuntos públicos y los que simplemente sueñan con la famosa torta que dice Fidel Herrera es una legitima aspiración de cada veracruzano, ahora se convirtió en la madre de todas las batallas que anteponen ya una crisis que desorienta, y pone de cabeza a toda una entidad cuando hay asuntos más importantes que atender cuando ha sido esa la tónica de Javier Duarte, de trabajar, pero algunos personajes de su gabinete andan por la libre y seguramente pronto pasaran a la banca del desempleo o a ganarse una diputación en las próximas elecciones federales intermedias del 2015.

Quienes sólo llevan agua a su molino y se avientan al precipicio sin paracaídas, en sus vanas intenciones, simplemente estarán pasando a ocupar pronto un espacio en la fría banca, pero de concreto.

Ojala y la cordura llegue a tiempo, y que el gobernador Duarte, sea escuchado entre los distintos grupos del poder priista de que no se aceleren para bien de Veracruz.

Pero también, sin dejar de pedir que a los senadores priistas, Héctor Yunes y José Yunes, y al propio Fidel Herrera Beltrán, les dejen de arrimar el caballo para ser víctimas de la guerra mediática desatada en su contra, como así se ha desatado en contra del propio gobernador Duarte, por parte de los propios dueños de medios enquistados en el presupuesto y que no tienen llenadera y chillan para cada vez para poder mamar más de los presupuestos de comunicación social.

Otra guerra es la que e ha destacado en contra del diputado priista por Boca del Río, Raúl Zarrabal Ferat, el chaparrito esta posicionado en la zona y ahora lo culpan hasta del mal tiempo. Ojala y se pare la ola de persecución en su contra por fines políticos y no de carácter legal.

Bien se recibió la noticia de la creación del Centro de Estudios de Género y de Derechos Humanos del estado de Veracruz, primero en este tipo en el país y acorde a una dinámica global, que ha sido una lucha cumplida por parte de la diputada local Mónica Robles, presidenta de la comisión en ese rubro del Congreso Estatal. Así las cosas.