Unos días después de que tomara protesta el diputado priista Tonatiuh Pola Estrada, se dijo víctima de una “guerra sucia” que pretende desestabilizar su carrera política.
“Se trata de dos o tres personas, sobre todo que les dolió que gané y no quiero decir nombres, porque hay cosas muy interesantes que hacer por Veracruz que caer en el juego de algunos”, señaló.
Y es que desde que asumió la curul se mantiene un rumor de la salida del Congreso local de Pola Estrada, para reincorporarse a Radio Televisión de Veracruz (RTV).
En aquella ocasión el legislador precisó que se trata de rumores; “se trata de rumores que van creciendo y hay una campaña en mi contra, afortunadamente tengo una buena relación con todos los medios de difusión, con los compañeros, he sido reportero por más de 20 años y duermo tranquilo”, dijo.
-¿Se queda en el Congreso local?, se le inquirió.
-Me quedo los tres años, ni tampoco tengo otro tipo de aspiración en otro sentido, porque mi compromiso es de tres años.
Un lenguaje puramente al estilo de todo político zorruno, pero más aún, un lenguaje del típico político que no quiere ver amenazado su confort y su coto de poder.
Pero lo cierto es que los rumores no han cesado para el ex conductor del noticiero matutino de Televisa Veracruz ya que se dice que alguien si le está “moviendo el tapete”.
Se habla que atrás de toda esa “grilla” se encuentra el doctor Lorenzo Castañeda, quien es su suplente en la fórmula que fue registrada ante el IEV en la pasada campaña electoral.
En su círculo cerrado, el ahora jefe de la Jurisdicción Sanitaria Número VIII suele comentar que si no hubiera sido por él difícilmente el comunicador hubiera ganado el distrito XXI.
También Lencho Castañeda despotrica en contra de su ex compañero al asegurar que Tonatiuh Pola solamente está preocupado por las banalidades tales como vestir con ropa de marca y de moda así como andar acompañado de bellas mujeres.
Esa aparente vida de frivolidad ha empezado a hacer mella en la imagen del legislador, quien debe cuidarse muy bien porque se ha hecho de varios enemigos en estos dos meses que tiene como diputado y en una de esas puede caer de la gracia de quien lo puso en el cargo.

UN MONUMENTO PARA YUNES
Apenas entró al gobierno, y en menos de una semana, el alcalde de Boca del Río, Miguel Ángel Yunes Márquez ha hecho lo que realmente le interesa proyectar. Un papel de víctima, de subirse a los medios con polémicas y acciones que resalten más que su gobierno a su persona. El objetivo ya es más que conocido.
Por eso, sin duda hay que destacar su discurso en domingo. Rueda de prensa cuando se sabe que mediáticamente aun son días muertos, para que el pueblo que gobierno sepa y le agradezca infinitamente que ha limpiado la ciudad.
Sean las razones que sean, si encontró una ciudad sucia, si la basura es obvio se genera todos los días, Yunes Márquez no está haciendo ningún favor a nada ni a nadie. Es soberbia puro, egocentrismo al máximo, hablar de que ha limpiado el municipio que gobierno, pues esa es una obligación total y que no está a discusión de cualquier alcalde que asume el poder.
Luego entonces, que clase de noticia es esa. Noticia en cambio, hubiera sido que él hubiera realizado largas jornadas diarias con escoba y recogedor en las colonias o bulevar de la ciudad de Boca del Río. Quizá hubiera ganado el Récord Guinnes. O los cuidadanos ya estarían cooperando para edificarle una estatua.
Por si fuera poco, en menos de una semana ya regidores priistas y el munícipe se han entablado en una inútil y estéril polémica porque fue retirada una placa de la conmemoración de la fundación de la ciudad. En donde los nombres de los gobernantes Javier Duarte y entonces alcalde, Salvador Manzur, saltaban a la vista.
Un soberbio y unos tontos ediles se han subido al ring. Pobre Boca del Río, así que le espera.

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