Dentro del gabinete de Javier Duarte destaca de manera particular el secretario de Finanzas, Tomás Ruiz sobre todo dentro de un esquema de cierta mediocridad de los titulares de las diversas dependencias estatales.
Es un funcionario estatal de otro nivel. La estatura política y el perfil del creador del SAT, contrasta con la medianía y limitación de sus compañeros.
Durante su comparecencia ante el congreso local respondió de manera congruente a los cuestionamientos y dio respuestas precisas a los legisladores que lamentablemente a la altura del grado académico y los conocimientos financieros que maneja el que fuera candidato seleccionado para la gubernatura veracruzana durante la administración de Miguel Alemán.
Durante su comparecencia recordó que Veracruz al igual que otras entidades del país tuvo que sortear un entorno económico muy complicado y de manera particular la situación de debito dejada por la anterior administración.
“Estos objetivos los logramos a través del fortalecimiento de los ingresos y de una estricta disciplina parar reducir los gastos del gobierno, que comprendió también una reestructuración de las obligaciones del Estado.”
El secretario de Finanzas y Planeación diseño una política de gasto con una visión que prioriza las necesidades de los veracruzanos a partir de la eficiencia el orden y el control presupuestal.
El ahorro en el gasto corriente se obtuvo mediante medidas de racionalidad y austeridad desde el inicio de la nueva administración donde se redujo sustancialmente el aparato burocrático.
No se redujeron sueldos, ni se abstuvieron de la compra de lujosas camionetas o se controló el número de secretarias o ayudantes o el uso desmedido de teléfonos celulares o gastos de representación.
Dentro de esta contracción del gasto corriente se redujo la planta laboral de la burocracia estatal en 2,170 personas.
En esta contención del gasto se decretó la extinción de 18 Organismos Públicos Centralizados finiquitando conforme a o derecho a otros 1,171 servidores públicos. En este contexto figuró el Colegio de Periodistas de Veracruz, cuyo director general, durante los ocho años que duró esta institución nunca cobró ningún salario y en cambio costeó de su bolsillo diversos eventos y eventuales gastos académicos.
Ni siquiera le dieron como despedida las gracias.
Sigue el ITAM como Alma Mater.
La señal del nombramiento de Alejandro Poire Romero como secretario de Gobernación es un nuevo respaldo hacia el precandidato panista a la Presidencia de la República, Ernesto Cordero. La importancia del cargo en el desarrollo de los procesos electorales que se avecinan será determinante en la compleja designación del aspirante a suceder a Felipe Calderón.
Es preciso destacar que sigue siendo el ITAM, el centro académico de estudios superiores de la ciudad de México el que mayor número de egresados aporta a los cargos gubernamentales más importantes del país.
Las escuelas privadas desplazaron a las universidades públicas en el quehacer político de México.
El optimismo de Ebrard.
¿Qué tan seguro esta Marcelo Ebrard de que van a ganar con la candidatura de Andrés Manuel López Obrador que no aceptó ningún cargo de elección popular para el 2012, confirmando de esta manera que su futuro se concentra en el próximo gabinete presidencial.?
El mañana del mejor alcalde del mundo no está en los primeros días del mes de julio, sino en el mes de diciembre del próximo año. La inversión política de Ebrard es la de estar disponible a partir de la toma de posesión de su amigo y de esta manera cristalizar su proyecto que más le interesa, la de integrar un gobierno de coalición.
Después de cinco largos años de espera se queda López Obrador por segunda vez con la candidatura presidencial de la izquierda. Es el único líder social importante de este país, con una gran convocatoria personal más allá de los partidos y con una propuesta progresista que constituye una posibilidad de cambio aceptable para la reconstrucción de la deplorable situación en que se encuentra la nación mexicana.