En casi la totalidad de las escuelas secundarias y bachilleratos se está dando la peor práctica ejercida al interior de la secretaría de Educación de Veracruz con la imposición de cuotas para el otorgamiento de las “concesiones” y posterior manejo de las llamadas cooperativas en dichos planteles que atienden a más de 800 mil alumnos en casi 3 mil 200 planteles.
Internamente se ha desatado un escándalo ante la inconformidad que está generando el esquema de la exigencia de recursos por el derecho a operar la cooperativa en cada uno de los planteles donde existe. Y es que además de afectar el empleo de miles de personas que dependía de ello, así como la economía familiar, se le suma las aportaciones que hasta en un 80 por ciento hacían a las escuelas en sí para su mantenimiento y apoyo en papelería y equipos, lo que ha desaparecido.
Todo se acabó porque los recursos ahora se destinan directamente a la titularidad de la SEV, con una serie de implicados.
Tan es un negocio que el tema con jugosos dividendos involucra, de acuerdo a las versiones, a un grupo compuesto, entre otros, por Salvador Marín Chaves, Carlos Abreu, Jorge Flores Lara el funcionario de la Sev, Enrique Acosta Libreros y obviamente, al propio secretario, Enrique Pérez quien ya tiene pleno conocimiento, y por negligencia quizá, ha permitido las irregularidades.
El asunto es que la premisa que mantiene el régimen de Miguel Angel Yunes está muy alejada de la realidad que se vive en la dependencia. La procurada transparencia y la política anticorrupción que ha marcado este gobierno dista mucho de lo que se vive en la secretaría mencionada.
Y las versiones agregan que, o se trata de una inmensa corrupción que se está viviendo en la secretaría pues a esta administración ya le queda el segundo y último año o es la famosa caja chica de donde se están acumulando recursos para las próximas campañas electorales. Y es que solo en una escuela con casi mil docentes la cuota mensual es de unos 50 mil pesos y si hay tres mil plantes esto es una gran fortuna cada mes para los altos funcionarios.
El escándalo de las tiendas escolares en secundarias y bachilleratos reventó cuando se inició el desalojo de los concesionarios actuales, pues eran los que estaban resolvieron la situación de atender a la población estudiantil a pesar de que la secretaría “mañosamente” no había lanzado la convocatoria para brindar el servicio.
Hay favoritismo en todos los sentidos lo que ya despertó la inconformidad de la mayoría de los directores de escuelas pues va en perjuicio de los a los estudiantes de los planteles dejando sin comer a decenas de ellos dentro de las instituciones atentando contra sus derechos.
Los beneficiados por las concesiones en las instituciones educativas se presentan a ejercer su nueva administración con oficios que están por encima de las normas internas y violentando reglamentos, aseguran, pero con una mafia entre el personal que deja mucha sospecha sobre la entrega de “moches” y sobornos, que violentan los derechos de los concesionarios actuales. Con el consabido efecto de dejar a miles de personas sin empleo en todas las regiones de Veracruz.
Las inspecciones escolares, jefaturas de sector recibían aportaciones del 20 por ciento de la cuota que se aporta para el mantenimiento y gastos de las oficinas y tareas de supervisión mientras que el 80 por ciento restante a la escuela para el cuidado de la infraestructura física así como equipamiento y papelería, pero ahora el cien por ciento se va directo a la secretaría.
No conforme con esta situación si los directores de las secundarias o bachilleratos reclaman porque de alguna forma veían un apoyo para equipar y mantener las escuelas con esos recursos, son amenazados con cese fulminante de sus plazas. Existen casos, afirman, de agresiones verbales y ofensivas a quienes no cumplen con las órdenes, a toda vista, anómalas.
La situación estaba fraguada desde el año anterior cuando no se publicó el “Acuerdo secretarial por el que establecen los lineamientos para la recepción, administración, distribución y comprobación de los ingresos obtenidos por concepto de concesiones de las Tiendas Escolares de Alimentos…”. Tanto que el director general de escuelas secundarias, Reyes Martínez Romero envió el oficio SEV/DGES/2041/20 al subsecretario de Educación Básica, Jorge Flores Lara, refiriendo a una solicitud previa y a la del momento con fecha 17 de agosto, para que le “instruyera al respecto en forma respetuosa, debido a que como usted sabe, el 21 de agosto a las 6.45 inician las clases del curso lectivo 2017-2018”, lo cual no sucedió.
Otro documento da cuenta de las instrucciones directas por parte del subsecretario Jorge Flores a los directores de los planteles para exigir que se cumpla con la transferencia a los nuevos prestadores de servicios, todos palomeados por los funcionarios mencionados en la secretaría bajo un jugoso acuerdo, pero más que nada por encima de la Ley.
MUY EN CORTO
REAPARECE MOTA CON PEPEYU. El precandidato del PRI a la gubernatura de Veracruz, Pepe Yunes, estuvo en municipios como Puente Nacional, La Antigua y Ursulo Galván.
En el acto celebrado en Cardel en el salón cañero se pudieron apreciar la llegada de ex alcaldes, líderes de los ingenios azucareros La Gloria y El modelo así como demás militancia, que poco a poco se fue sumando.
Reaparecieron al lado de Pepe priistas que saben que si no se ponen a trabajar pueden pasarse seis años en la banca y hubo quienes aguantaron dos pero ya un sexenio suena bastante complicado.
Se hicieron presentes el ex dirigente estatal del tricolor, Ricardo Landa Cano, la ex directora de Espacios Educativos, Karime Aguilera, y la ex coordinadora estatal de Becas, Claudia Ramón Perea.
Llegaron otros que aspiran a nuevos cargos como el dirigente de la CNC, Juan Carlos Molina los ex alcaldes de Paso de Ovejas, Adolfo Ramírez y Ana Rosa Valdez, que son matrimonio; la ex alcaldesa y diputada federal por Pánuco, Zita Pazzi Maza.
Así como otros que actualmente tiene cargo como el legislador Adolfo Mota a quien parece que lo obligaron a bajar a la "aldea" a apoyar al partido que le ha dado la oportunidad de ser un privilegiado y el único que parece estarla librando.
Luego todos se trasladaron a una finca a orilla de carretera donde la comida consistió en tamales de barbacoa, de masa y de elote, frijoles refritos y algunos refrescos de sabor.