Es impresionante el conocimiento que tiene el candidato presidencial Andrés López Obrador sobre la clase política veracruzana, en el desarrollo de una comida privada en Tlapacoyan, comentaba el líder de Morena que tenía tiempo que le había dejado de interesar el gobernador de Veracruz, Miguel Ángel Yunes Linares, sobre todo por el rápido desmoronamiento de su gobierno y que no le gustaba hacer leña del árbol caído, pero en el calor del discurso y ante el lleno de la plaza principal que tenía mucho tiempo esperándolo bajo un ardiente sol de la capital del Totonacapan, recordó lo que se había comentado sobre el diario que habían encontrado en una bodega de la señora Karime Macías Tubilla, esposa del exgobernador Javier Duarte donde se refería que merecía abundancia.
Tomado como ejemplo salió a relucir el reloj de seis millones de pesos, del que obviamente nunca enseñará el choleño la factura, dijo AMLO que también el político neopanista merecía abundancia. Los asistentes festejaron la broma, pero lo interesante es que de antemano sabía el tabasqueño que el enojón del gobernante le iba a contestar. Lo conoce a la perfección y sabe con anticipación como va a reaccionar. Irritación donde pierde el control y como si fuera un duelo de cantina inventa un debate, cuando de antemano está consciente que no se va a rebajar una figura política de nivel nacional con un expriista que va de salida y que lo único relevante es haber vivido bajo la falda de la maestra Elba Esther Gordillo.
Los comentarios sobre las reacciones de Yunes Linares salían sobrando es cuando AMLO hace referencia que no existe ni habrá ningún antecedente en la historia de nuestro país que un gobernador le haga entrega a su hijo de la gubernatura. Eso es lo insólito que no debe permitir por dignidad y orgullo de los veracruzanos. Hizo referencias López Obrador al general Heriberto Jara y don Adolfo Ruiz Cortines, el último presidente honesto y todos los ilustres veracruzanos de los que se sienten orgullosos el pueblo, afirmado que se revolcarían en sus tumbas si esto llegara a ocurrir.
El exgobernador Agustín Acosta Lagunes hubiera gritado con su voz chillona: “¡Pero qué es esto!” Desde cuando existe en la entidad veracruzana una monarquía convertida en una disimulada reelección.
El candidato de Morena, Cuitláhuac García, asegura que también su hijo posee un reloj millonario igual al de su padre. Que hay una foto que los muestra.
En comentarios sobre el mismo tema sobre el debate que pretende Yunes Linares donde asegura que tiene pruebas que los políticos de Morena recibían dinero del exgobernador Duarte de Ochoa, es un tema que ya tienen más de dos años que lo vienen diciendo, si alguien tiene pruebas porque no las presenta. Ocultarlas pudiera ser un serio delito. Para el común de los ciudadanos aseguran que sólo blofean y que no tienen nada, acostumbrados a mentir y como nadie les cree siguen la farsa.
Tlapacoyan es un municipio gobernado por el PAN y lo increíble es que hasta los propios funcionarios estaban presentes aplaudían al futuro Presidente de la República quien ofreció vender el avión de Peña Nieto a Donald Trump.