6 de cada 10 veracruzanos son pobres

• Con Duarte la pobreza se incrementó año con año en la entidad

Magda Zayas Muñoz @magzamu

En el Veracruz “donde no pasa nada” ese que solo esta presente en la mente de Javier Duarte, quien presume cifras alegres y extraordinarios resultados durante su sexenio, queda claro que aquí el desarrollo económico se estacó, basta observar la cifras dadas a conocer por CONEVAL, que muestran el crecimiento de la pobreza en este sexenio.

Y es que de acuerdo al rubro de Medición de la pobreza en México 2014, (último a la fecha) Veracruz es el tercer estado con mayor índice de pobreza en México. Existen 4 millones 634 mil 200 personas que viven en situación de pobreza, lo que significa el 58% de su población. Esto quiere decir que seis de cada 10 veracruzanos son pobres.

¡Imagínese amable lector, 6 de cada 10 veracruzanos en pobreza! ¿No es esto una cifra alarmante, que jamás ha sido citada y reconocida por Javier Duarte? Pero no aquí ocurre todo lo contrarios, pues se habla de resultado que ni se ven, ni se sienten.

Cabe precisar que de los 634 mil 200 veracruzanos que viven en pobreza, un millón 370 mil 500 personas habitan en peores condiciones de pobreza extrema y sólo 975 mil 500 veracruzanos son población no pobre y no vulnerable. Esto evidenciaría que la Cruzada contra el Hambre en el gobierno de Javier Duarte no ha dado resultados.

Los índices de pobreza en Veracruz se incrementaron de 2010 a 2014 (gestión duartista) en un 11%, pues en 2010 había cuatro millones 448 mil pobres. En cuanto a la pobreza extrema aumentó 22% ¡pero bueno aquí, aquí todo está de maravilla! Mientras las protestas continúan y las acusaciones se incrementan.

Por cierto que entre los pocos Duartistas que aún salen a defender lo indefendible se encuentra el secretario particular de gobernador del Estado Javier Duarte de Ochoa, José Ramón Cárdeno Shaadi, quien en días pasados se atrevió a corear en un evento “¡que viva Javier Duarte de Ochoa!”, porque se “trata de un hombre apegado a derecho y lo van extrañar porque es un buen hombre”.

Luego se atrevió a señalar “es un gobernador que ha hecho bien su trabajo, ha sido respetuoso con las instituciones, con la federación y los municipios, un hombre apegado a derecho” lo anterior generó una lluvia de críticas al funcionario, quien seguramente se arrepintió de haber lanzado tan atrevida declaración.

Por si su verborrea no fuera suficiente se atrevió a reprochar a quienes dijo han abandonado a Duarte de Ochoa, pues dijo “no hemos terminado, nos quedan dos meses para terminar bien y terminar fuerte”. Y mientras tanto Duarte de Ochoa se va a Los Pinos sin solicitar audiencia pretendiendo ser recibido por Enrique Peña Nieto en una acción desesperada, pero no contaba que lo regresarían por donde vino.

Por allá no lo quieren ni ver y ese portazo que le lanzaron, refrenda la ruptura de un gobernante priista con su jefe máximo, quien tras interminables escándalos de corrupción se ha cerrado la puertas. Mientras tanto aquí en la entidad, los veracruzanos cuentan los días para que Duarte se vaya. Así las cosas en nuestra entidad