El problema es serio para el gobernador Javier Duarte de Ochoa y su antecesor Fidel Herrera Beltrán, quien sigue empeñado en participar en la selección del candidato del PRI a la gubernatura de Veracruz. La razón es que los aspirantes del tricolor que están posicionados son solo los dos senadores José y Héctor Yunes.

De los aspirantes con el sello del fidelismo y duartismo donde figura Alberto Silva, Erick Lagos, Tomás Ruiz y Gerardo Buganza no figuran en los estudios de opinión levantados. La situación es crítica para el tricolor porque el mejor posicionado y del que ha escuchado más el pueblo veracruzano es del panista Miguel Ángel Yunes Linares. Estas encuestas solo se refieren a las grandes ciudades, la situación cambia radicalmente cuando esta llega a las zonas marginadas y al campo donde el PRI sigue en un primer lugar.

Tanto para Javier Duarte como para Fidel Herrera resulta muy grave y hasta riesgoso para sus carreras políticas que llegara un candidato de oposición al gobierno de la minigubernatura.

La persecución política que se desatara sería de antología y no solo para los dos ex gobernantes sino para la mayoría de los funcionarios importantes que laboraron en dichas administraciones. Una masiva cacería de brujas que ocuparía titulares de los medios nacionales y locales.

Ellos saben que lo que cueste saldría barato con tal de que el PRI no pierda el poder oficial en el 2016.

Se van a jugar el todo por el todo

De allí que aunque no sea de su agrado personal cualquiera de los dos senadores priistas son los únicos que podrían competir con alguna posibilidad frente al rival de la alianza del PRD y PAN que contará con recursos y sobre todo por el interés que tiene Acción Nacional de ganar en Veracruz por el trascendente papel que significa la entidad veracruzana en los comicios presidenciales del 2018.

La ventaja de Duarte de Ochoa es que contará con todo el apoyo de la federación y del PRI nacional para retener la hegemonía política del partido tricolor.

El turismo electoral está en plena marcha. En el sur de Veracruz ya se inició y de manera particular en el puerto de Coatzacoalcos hay una peregrinación constante proveniente del vecino estado de Chiapas.

Donde cuentan con un poderoso padrino que los subsidia con viajes en autobuses y cómodo alojamiento en buenos hoteles.

En la edición de ayer se dieron a conocer los primeros resultados de las encuestas realizadas y ponen los focos rojos sobre el multitudinario rechazo que existe entre los votantes hacia el partido tricolor. Situación que hay que remontar con recursos para que tanto maestros, como los miles de jubilados y los marginados campesinos apoyan a la causa priista y eso solo se hace con fuertes sumas de dinero. El voto en esta ocasión se va a cotizar muy alto .