En Veracruz está más que demostrado
que el ex gobernador Dante
Delgado Rannauro, líder fundador
de Movimiento Ciudadano, “no es
profeta en su tierra”.
Y es que mientras en su entidad
natal no pudo ganar uno solo de los
21 distritos electorales federales
del estado, en Jalisco acaba de
dar el campanazo con el abanderamiento
de líderes de un fuerte
movimiento político-social que
tiene como núcleo principal a jóvenes
con otra visión de la política,
el cual es encabezado por Enrique
Alfaro Ramírez, un ingeniero civil
de 42 años de edad, quien en 2009,
pese al avasallamiento del PRI, ganó
como candidato de la coalición
del PRD-PT en el municipio de
Tlajomulco presidiendo el primer
gobierno de izquierda en el área
metropolitana de Guadalajara,
ciudad capital que ahora gobernará
tras arrasar con el partido
naranja en los comicios del domingo
pasado.
En Jalisco, Delgado Rannauro
ha logrado lo que en Veracruz no
ha podido conseguir desde que
fundó Convergencia Democrática
en 1996. Su mayor logro como
opositor se remite hasta ahora a la
sucesión municipal de 1997, cuando
en alianza con el PRD operó
desde el interior del reclusorio de
Pacho Viejo y ganó las principales
alcaldías, entre ellas las de Xalapa,
Tuxpan, Papantla, Coatzacoalcos,
Minatitlán y Cosamaloapan, entre
otras.
Sin embargo, en las sucesiones
estatales de 2004 y 2010 Dante
ha participado como candidato a
gobernador por la coalición PRDPT-
Convergencia y no ha podido
hacerse del poder que ya ejerció
durante 1988-1992, cuatrienio en
el que sustituyó a don Fernando
Gutiérrez Barrios, quien había solicitado
licencia al Congreso local
para separarse de la gubernatura
y asumir la Secretaría de Gobernación
por encargo del presidente
Salinas.
Es más, en ambas sucesiones
locales, Delgado Rannauro fue
factor determinante para el continuismo
de la hegemonía del PRI,
obstruyendo la alternancia en el
poder.
En 2004 terminó levantándole
la mano al priísta Fidel Herrera
Beltrán, quien oficialmente ganó
la elección a Gerardo Buganza Salmerón,
del PAN, con un apretado
margen de 25 mil votos.
Y, en 2010, volvió a facilitar la
permanencia del partido tricolor
en Palacio de Gobierno, pues, aunque
en menor cantidad, terminó
restándole sufragios al partido
blanquiazul, cuyo candidato Miguel
Ángel Yunes Linares fue
derrotado por Javier Duarte de
Ochoa con una ventaja más holgada,
de aproximadamente 80 mil
votos.
Sin embargo, en los recientes
comicios de Jalisco, Dante y su
partido obtuvieron muy buenos
dividendos electorales gracias a
su atinada alianza con Enrique
Alfaro, quien ya en 2012 estuvo
muy cerca de ganar el gobierno
jalisciense. En esa sucesión gubernamental,
Alfaro obtuvo un millón
160 mil 870 votos (34.04%) contra
un millón 309 mil 836 sufragios
(38.41%) acreditados al priista
Aristóteles Sandoval.
Hace tres años, después de un
complicado proceso de elección
de candidato a la gubernatura, se
formalizó la coalición entre el PT,
Movimiento Ciudadano y la Agrupación
Política Alianza Ciudadana
para postular al hijo de Enrique
Alfaro Anguiano, ex rector de la
Universidad de Guadalajara, y de
Bertha Ramírez Fruchier, trabajadora
social que ha impulsado
diversos proyectos de asistencia y
apoyo a grupos vulnerables.
Alfaro es un líder social carismático
que fue muy bien calificado
en su gestión como alcalde
de Tlajomulco de Zúñiga, cargo
que desempeñó de enero de 2010
a diciembre de 2011.
Durante su mandato se realizó,
por primera vez en el país, un ejercicio
de revocación de mandato
para que la gente del municipio
decidiera si quería que siguiera
al frente del ayuntamiento. Fue
aprobado por más del 95% de los
electores participantes.
Su administración municipal
se distinguió por su manejo austero,
cuyos ahorros le permitieron
apoyar económicamente a dos
millares de jefas de familia y de
adultos mayores, y dotar a más
de 90 mil alumnos de preescolar y
primaria de útiles escolares y uniformes
gratuitos. En 2011 convocó
al primer ejercicio de Presupuesto
Participativo en la historia de la
metrópoli tapatía.
Se presentaron 28 proyectos
de obra pública y recuperación
de espacios públicos para que los
ciudadanos que pagaran su impuesto
predial eligieran las tres
que consideraran más necesarias,
destinándoles el 15% de su tributo.
En esa consulta participaron 21
mil 179 ciudadanos y se construyeron
11 obras prioritarias.
Por eso el impresionante saldo
electoral de Dante y su partido en
las elecciones de este domingo.
Arrasaron en Guadalajara y otros
municipios de esa zona metropolitana
como Zapopan, Tlajomulco
y Tlaquepaque, además de Juanacatlán,
El Salto, Zapotlanejo,
Tepatitlán, Puerto Vallarta, Ocotlán,
Jocotepec, Acatlán de Juárez,
Etzatlán y Ciudad Guzmán.
Gobernarán al 62% de los
jaliscienses y tienen 9 de los 20
diputados de mayoría locales,
constituyéndose en la primera
fuerza en el Congreso del estado.
Pero en el nivel federal, Movimiento
Ciudadano también dio
la sorpresa al lograr el 6.37 por
ciento de la votación, con lo que
alcanzará cerca de 29 curules en
el Congreso de la Unión, más del
doble de las 12 que actualmente
tiene.
No es fortuito, pues, que el
próximo coordinador de la bancada
en la LXIII Legislatura federal
pudiera ser Clemente Castañeda,
actual coordinador legislativo de
Movimiento Ciudadano en Jalisco,
quien llegará a San Lázaro como
parte de la marejada de apoyos
que recibió Enrique Alfaro y que
pintaron de naranja la zona metropolitana
de Guadalajara.