Se le olvidó salpicar
¿Cuál será el trato que les da a sus empleados Marcelo Montiel, titular de la delegación de Sedesol en la entidad, para que sean ellos precisamente los que proporcionen toda la información sobre los desvíos que se realizan en esa dependencia que tiene con un pie en la cárcel al expresidente de Coatzacoalcos? Debe ser un odio jarocho. Se le olvidó al señor delegado que tiene que salpicar y compartir todas sus pillerías. Es impresionante el lujo de detalles y la información tan completa y bien documentada que le dieran al senador perredista Alejandro Encinas para hundir al político de Naranjos. Para este trabajo se requieren horas de investigación, tomar videos, reunir toda clase de documentos, revisar expedientes, tomar fotografías de facturas, etc. etc. Es una intensa labor de todo un equipo de burócratas que trabajan directamente con el señor Marcelo Montiel. No se descarta que exista otro grupo político dentro del gabinete del gobernador Javier Duarte quienes en la disputa por repartirse estos recursos públicos federales sean los que trabajaron sobornando a la gente de mayor confianza del representante de Sedesol. Si en este caso también está involucrado el líder estatal del PRI, Alfredo Ferrari o se la están pasando de humo. Debe estar más que molesto por lo que exigirá su parte de los 500 millones de pesos que se fueron a otros bolsillos. Son tan absurdas las irregularidades como la compra de 76 millones de pesos en paliacates. El único que los usaba era el exgobernador Fernando Gutiérrez Barrios. O los 96millones en tortilleros, 56 millones en vasos de plástico. No podrán ser acusados de rateros sino de pendejos. Para refrescar la memoria al funcionario Marcelo Montiel, estás son las diez frases más utilizadas de cómo es la corrupción en México: “Ayúdame para ayudarte”, que se utiliza para cualquier tramite burocrático. “Ponerse Guapo”, ofrecer un regalo para asegurar el favor. “Lo dejo a su criterio”, cuando hay que dar una mordida. “Acéiteme la mano”, otra forma de sobornar. ¿Cómo nos arreglamos?, cuando hay que pagar una multa o infracción. “Con dinero baila el perro”, cuando se exige una gratificación. “No importa que robe, pero que salpique”. Es el pequeño detalle que se le olvido al funcionario federal. “El año de Hidalgo, pendejo el que deje algo”, como que se adelantaron desde el primer día que entraron al gobierno. “La moral es un árbol que da moras”, así respondía el exgobernador potosino Gonzalo N. Santos, cuando alguien le reclamaba su falta de ética. Por último la frase celebre del ex gobernador mexiquense, Carlos Hank González, “Un político pobre, es un pobre político”. Pareciera que es el principal mandamiento que toda la clase política del país sigue al pie de la letra. Reconocimiento a Duarte Gerardo Cárdenas, presidente de los industriales aplaude la medida del titular de Educación, Flavino Ríos, quien cuenta con el respaldo del gobernador Javier Duarte de terminar con los miles de maestros aviadores que durante décadas han seguido sangrando las nóminas oficiales.
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