En el seguimiento de los diversos acontecimientos, es como dicen los expertos en el análisis de la política veracruzana, se podrá descifrar el tema de la sucesión del gobernador Javier Duarte, cuando ya está casi a la mitad de su mandato y a muchos políticos de les ve adelante en sus pretensiones lógicas de figurar como precandidatos para el 2016.

Para descifrar el enigma, se requieren de muchas horas de dialogo y consulta con los expertos que saben y conocen los recovecos que de forma histórica se dan para la postulación de un candidato a la gubernatura de Veracruz, algo que no ha sido nada fácil.

Así en las últimas semanas de pronto, aparece en una intensa campaña de medios, el senador José Yunes Zorrilla, a quién le dan el beneficio de la duda por una supuesta buena relación con un súper secretario del gabinete del presidente Enrique Peña Nieto.

En otro rubro, aparece como un caballo negro, el licenciado Miguel Alemán Magnani, quién es un personaje maduro y de muchas cualidades en donde si se lo proponen, al igual que sucedió a su señor padre, don Miguel Alemán Velasco, se le dio la circunstancia, debido a la constancia y a la conciencia.

Entre otros, el senador Héctor Yunes Landa, se estará metiendo con todo y ya con mucha experiencia, es quien repunta en las preferencias.

En la lista no hay que descartar a Jorge Carvallo Delfín, actual secretario particular del gobernador Javier Duarte y al propio Salvador Manzur Diaz, que de un momento a otro puede volver a ser llamado al gabinete duartista.

En los nombres, aparece el de Erick Lagos Hernández, quién viene de obtener positivos resultados como presidente estatal del PRI en estos lares.

Entre los nombres de varias mujeres, se menciona con mucha intensidad al de la alcaldesa de Veracruz, Carolina Gudiño Corro.

Sin quedar descartado y con una experiencia de haber luchado como candidato a la gubernatura pero por el PAN, está Gerardo Buganza, quién esta posicionado y puede dar la pelea ahora como un candidato del PRI.

Viene también se atrás, y según los expertos puede crecer como la espuma en los próximos meses, el famoso Alberto Silva Ramón, alcalde de Tuxpan, a quien pronto se le verá encumbrado ya en un importante cargo en el gabinete de Javier Duarte.

En el gabinete federal de Peña Nieto, también están varios veracruzanos que pueden integrarse a la larga lista de aspirantes a suceder a Javier Duarte en el 2016.

Pero los esforzados lectores y consumados analistas de la delicada política en el estado de Veracruz, se remontan al estudio minucioso y preciso de los pasos dados por Enrique Peña Nieto, en sus tiempos de gobernador del estado de México, en donde privilegió al más altamente posicionado para ser candidato al gobierno estatal mexiquense que era Eruviel Avila en lugar de Alfredo del Mazo Maza, un poco abajo en las preferencias.

Así es, que con un presidente priista y con una clara visión democrática y respetuoso de los cánones políticos en el PRI, dicen los expertos que en el estado de Veracruz, en tiempos de Javier Duarte y del presidente Enrique Peña Nieto, la decisión estará supeditada a los posicionamientos de las encuestas y al reconocimiento a toda una trayectoria y carrera en la política y el servicio público, sin sesgos ni dedazos, simplemente lo que indique la lógica algebraica de la política.

Con una exposición que reúne las obras más representativas del pintor orizabeño José Justo Montiel, el Gobierno de Veracruz, a través del Instituto Veracruzano de la Cultura (Ivec), la Universidad Veracruzana (UV) y Fomento Cultural Banamex A. C., enriquecen el ambiente cultural del Centro Histórico de la capital del país.

A través de las obras pertenecientes a la colección UV del Museo de Arte del Estado de Veracruz, de Orizaba, José Justo Montiel, recrea pasajes importantes del siglo XIX que marcaron la historia tanto del estado como del país; se trata de una gran cantidad de retratos de personajes importantes de la época y de personalidades cercanas al artista.

Dentro de su narrativa pictórica, destacan las obras realizadas en relación con la visita de los emperadores Maximiliano y Carlota a La Pluviosilla, así como las que son testimonio de la influencia de éstos en los orizabeños de la época, tal es el caso de la obra titulada El bibliotecario, donde José Justo plasma en primer plano a un hombre que, orgulloso, porta una medalla obsequiada por tan distinguidos visitantes.

Asimismo, la exposición destaca las habilidades de copista y la gran mano del también autor del retrato a doña Teresa Patiño de Vivanco, al tiempo en que muestra su amor por la tierra que lo vio nacer, a través de bellos paisajes que ilustran la geografía de la Orizaba del siglo XIX.

Como vivo ejemplo de la tenacidad veracruzana, Justo Montiel siempre luchó por ser aceptado en la academia de la época, ya que, habiéndose formado a los 14 años como aprendiz del maestro Gabriel Barranco, no poseía una importante currícula para el exigente gremio artístico de la época.

Fruto de su tesón, a los 35 años, finalmente ingresó a la Academia de San Carlos, donde recibió importante instrucción al lado de otros grandes como Tiburcio Sánchez, Fidencio Díaz de la Vega, Ramón Sagredo y Felipe S. Gutiérrez, todos bajo la exigente y talentosa mano del maestro catalán Pelegrín Clavé.

Esta exposición montada en el interior del Palacio de Iturbide, en la calle I. Madero, en el Centro Histórico de la Ciudad de México, es una excelente opción cultural de recreación y, sobre todo, para conocer a un gran pintor veracruzano. Así las cosas.