En esta semana en México, seguimos mal y de malas, todo debido a los mensajes que altos funcionarios del gobierno norteamericano han emitido sobre México en el transcurso de la presente semana se deben considerar como la más grave amenaza en contra del territorio nacional de los últimos años, en lo que a juicio de los expertos se constituye en toda una agresión que demuestra la desmedida ambición del gobierno de Barack Obama, pero también el gobierno francés se suma a las acciones de desprestigio por el Caso de Florence Cassez.
El subsecretario de la defensa Joseph W. Westphal, al inicio de la semana habló de una insurgencia en México, que sólo existe en la mente de de este tipo de funcionario ante lo que se consideró se trata de una declaración poco seria y hasta fantaciosa.
Calificó la situación de México como uno de los “puntos ciegos” en la política exterior de Estados Unidos, el subsecretario de Defensa estadunidense Joseph W. Westphal, al considerar a la delincuencia organizada como una “insurgencia que busca hacerse con el poder en México”. Lo que por supuesto significó una respuesta inmediata de la canciller mexicana, Patricia Espinosa.En declaraciones recogidas por el diario The Salt Lake Tribune Durante una conferencia a los alumnos de la Universidad de Utah, el funcionario fue cuestionado por un estudiante acerca de las omisiones en la agenda global de su país. Como respuesta, dijo estar preocupado por un escenario en el cual sea necesario desplegar al ejército estadunidense a lo largo de la frontera con nuestro país o, incluso, “a través de ella”.“Como ustedes saben, (la delincuencia) es una forma de insurgencia en México, con cárteles de la droga en nuestra frontera. Esto no es sólo acerca de drogas e inmigrantes ilegales, se trata, potencialmente, de la toma del gobierno por personas corruptas”, explicó.Agregó, que no quería ver alguna vez una situación en la que los soldados estadunidenses tuvieran que ser enviados para luchar contra dicha insurgencia,  “en nuestra frontera, al violar nuestra constitución, o tener que enviarlos a través de la frontera”. Westphal es el segundo funcionario de más alto rango de Estados Unidos que compara públicamente la situación de México con una “insurgencia”, luego de que la secretaria de Estado, Hillary Clinton, hiciera una evaluación igual en septiembre pasado.
Westphal se especializa en Ciencias Políticas, ha sido profesor en las universidades de Maine, Nueva York y Georgetown; sirve al ejército desde 1998 y ha sido asesor del Congreso y de diversos funcionarios del gabinete estadunidense. En 2008 se incorporó al gobierno de Barack
También, Janet napolitano, secretaria de seguridad nacional de EU, ante el senado de aquel país evocó apreciaciones poco creíbles y sin soporte alguno en torno a la posible vinculación de Al Qaeda con grupos de carteles mexicanos, lo que no tiene sustento y se trata sólo de justificar una posible futura agresión en contra de territorio mexicano

La respuesta
Para Ignacio Morales Lechuga, un conocedor del derecho internacional, así como de los tratados signados en materia de cooperación bilateral de México con EU y quién como procurador general de la república en tiempos del presidente Carlos Salinas, logró la extradición del doctor Humberto Alvarez Machaín, detenido ilícitamente en territorio nacional, dijo que este tema es delicado y peligroso para el país y que el gobierno de Felipe Calderón, debe responder con energía.
El gobierno de México debe de responder y actuar ante la paranoia norteamericana y exigir que presenten las pruebas y evitar que pretendan invadir o instalar una base militar en territorio nacional, o simplemente que cometan el mismo error como sucedió con Irak que nunca demostraron la existencia de las supuestas plantas nucleares y las armas químicas, dice el licenciado Ignacio Morales Lechuga, ex procurador general de la república y experto en seguridad nacional.
El gobierno de México que encabeza Felipe Calderón, es quién debe exigir al gobierno de EU las pruebas para las aventuradas declaraciones de la funcionaria Janet Reno ante el senado de su país en torno a la supuesta sospecha manifiesta, que sólo se trata de conjeturas, más no tienen pruebas de tal problema, y lo que se puede buscar por parte del vecino país del norte, es una falsa justificación a un problema que no existe y que requiere ya la respuesta de la cancillería y del gobierno al más alto nivel.
“El tema no es para echarlo por la borda o para desestimarlo, se trata de que están señalando los presuntos focos rojos mediante apreciaciones unilaterales que no tienen el soporte y por lo mismo en la supuesta presunción, no hay los elementos para una intervención armada de EU en territorio nacional y menos la instalación de una base militar con su frontera.
Se trata de presiones y de amenazas, que deben ser atendidas de inmediato en el concierto del derecho internacional y bajo un rigor estricto del derecho de que muestren pruebas a tan aventuradas expresiones de los funcionarios norteamericanos, que en forma escalonada se han dado a la tarea de hablar sobre su preocupación infundada.
“Estados Unidos, no reconoce los graves problemas que se presentan dentro de su territorio nacional y que son los verdaderos creadores de los problemas de inseguridad en México, como consecuencia de la indiscriminada venta de armas que producen su tráfico hacia nuestro país y el consumo elevado de drogas, allá en territorio norteamericano en donde poco han podido hacer para reducir y atacar el tema de las adicciones”, dice el también ex presidente del consejo nacional de seguridad pública en el gobierno de Miguel de la Madrid.
No hay que olvidar que México sólo es paso del tráfico de estupefaciente y migrantes hacia el vecino país del norte, pero de ninguna manera aquí se ha creado el problema que tiene que ver como un asunto relevante entre vecinos y en donde a Estados Unidos, le corresponde de primera instancia ayudar y apoyar con recursos financieros y materiales para esta lucha que se ha globalizado y en México se ha demostrado que hay una lucha para atacar el problema.
Los políticos en México, principalmente el gobierno del presidente Felipe Calderón, deben de mostrar preocupación por este tema generado en Estados Unidos y en donde se percibe un interés injustificado basado en conjeturas y no exhiben las pruebas de estas versiones que alarman más aun a la población mexicana y afectan seriamente a la imagen del país en el contexto internacional como sucedió con Irak. Este es un tema delicado y peligroso, enfatiza el también ex secretario de gobierno veracruzano, ex procurador del DF y ex embajador de México en Francia, así como ex rector de una de las instituciones académicas más prestigiadas como lo es la Escuela Libre de Derecho.
Por cierto, el destacado abogado veracruzano y notario público en el Distrito Federal, Ignacio Morales Lechuga, será reconocido mañana lunes en sesión de cabildo del ayuntamiento de Puebla por su importante trayectoria en el servicio público, el altruismo y como distinguido profesional del derecho, quien recibirá la máxima distinción denominada Cedula Real.Así las cosas.