La tesis de la base ideológica de Javier Duarte es que no hay desarrollo social sin desarrollo económico y la pobreza sólo se podrá reducir cuando haya una distribución equitativa de la riqueza.
Lo anterior significa que el futuro gobernador de Veracruz a partir del próximo 30 de noviembre, anuncia que se harán todas las adecuaciones necesarias a las políticas públicas, para que se de la conjunción de esfuerzos y se coordinen hacia un sólo objetivo: hacer que Veracruz y los veracruzanos avancen.
Duarte de Ochoa, continua con el análisis de las prioridades urgentes y necesarias para la población veracruzana, quedando esto de manifiesto al reunirse con el arzobispo de Xalapa, monseñor Hipólito Reyes Larios, en donde ambos trataron a fondo el tema de la atención a los grupos más desposeídos, en donde el doctor Javier Duarte, manifestó su respeto a la libertad de culto, y también hizo un reconocimiento a los credos religiosos por su vocación social y siempre de apoyo a la población vulnerable.
Es importante indicó, que las políticas de asistencia social, sobre todo en el debate legislativo en la Cámara de Diputados, siempre están en tela de juicio por su visión meramente asistencialista, por lo que consideró necesario alejarlas del clientelismo político para que entonces sí exista un desarrollo social efectivo. Lo que indica que Veracruz como una de las entidades federativas más politizadas del país con Javier Duarte de Ochoa a la cabeza como titular del ejecutivo estatal empezará una nueva época de respeto a la pluralidad política y sobre todo de amplia consideración para los grupos vulnerables que requieren por lógica de mayor atención.
“A un año de los efectos de una crisis económica mundial que provocó una contracción económica nacional, México tiene 6 millones de nuevos pobres, no lo digo yo, lo informó oficialmente el Banco Mundial durante esta semana, así que debemos asumir este reporte como una llamada de atención y asumir como un reto de los gobiernos, de todos los gobiernos sin distingo partidista, que la pobreza y la marginación disminuyan”, comentó Duarte de Ochoa.
Como próximo gobernador de los veracruzanos anunció que encabezará un gobierno con vocación social, pues las circunstancias requieren de una concentración de esfuerzos y recursos, así como de la reorientación de las políticas públicas para hacer frente a los rezagos históricos, ya que nunca habrá presupuesto que alcance si se busca “paliar las necesidades de la población más desprotegida”.
Insistió en la profesionalización de cuadros, sobre todo en un área tan sensible como el desarrollo social, Duarte de Ochoa dijo que los programas de combate a la pobreza deben reforzarse con financiamiento a proyectos productivos, pues sólo con la generación y la distribución de la riqueza se podrán superar las brechas de la marginación.
Hay que destacar que el trabajo que Javier Duarte, realiza a lo largo y ancho del territorio veracruzano es de consulta amplia y profunda, pero también habla de manera directa con la gente a la que le expresa su agradecimiento por la confianza otorgada a través del sufragio y también refrenda su compromiso de apoyar por igual a todas las causas sin distinción de siglas partidistas, ni de credos, ni de ideologías.
También, la señora Karime Macias de Duarte, hace lo propio como parte de su compromiso de trabajo y de respaldo a los veracruzanos. Se trata de intensificar las tareas de ayuda social y asistencial y de ampliarlas a mayores coberturas de la población desprotegida en zonas urbanas, rurales y serranas.
El matrimonio de Javier Duarte y Karime Macias, inspira la confianza en una joven pareja que con mucha voluntad, capacidad, decisión y energía estarán dando su máximo esfuerzo para dar su contribución a la población de una entidad que tiene una gran demanda de ayuda y apoyo asistencial, indispensables para que los adultos, jóvenes y niños, así como las mujeres, cuenten con la atención elemental y básica en materia de salud y de la ayuda indispensable cuando con urgencia se requiere por causas de desastres naturales o de cualquier tipo de situación de emergencia.

Tambores de guerra
Tensan la situación entre Venezuela y Colombia, los presidentes de ambas naciones en pugna desde hace varios años. En donde parece todo indicar que existen grandes desafíos para propiciar de lo que esta cansado el mundo, a una vieja historia ancestral de la humanidad: las guerras.
Hugo Chávez, presidente de Venezuela y Alvaro Uribe de Colombia, ambos dignatarios que obedecen cada uno a consignas diferentes, uno a la izquierda en decadencia, pero un segundo aíre en la política como consecuencia de las férreas cadenas de atadura y explotación de los neoliberales poderosos que hoy como siempre en donde operan de inmediato aparece en el escenario regional latinoamericano, uno de los cuatro jinetes del Apocalipsis, y cuando menos se espera, llega para derramar la sangre de inocentes y dejar una estela de dolor y amargura entre los que menos tienen.
Así es que nada detendrá lo inesperado y puede estallar en cualquier momento un conflicto armado de grandes dimensiones como ha sucedido en Europa y el medio oriente, en Africa y en muchas regiones del orbe en donde por situaciones increíbles se desatan las guerras xenófobas y de luchas que no tienen una causa justificada, pero que lamentablemente se originan por el beneficio a las grandes potencias que mueven al mundo en ese sentido y más cuando hay crisis económica en los países ricos. Las guerras con como la política, aquí nada es al azar. Así las cosas.

Bendición de nichos
El arquitecto Miguel Angel Enríquez González y el presbítero Pedro Martínez Carrillo, informan que para el próximo 12 de agosto el obispo de Veracruz, monseñor Luís Felipe Gallardo Martín del Campo, estará en la parroquia de la Inmaculada Concepción y San Judas Tadeo de la colonia petrolera de la ciudad de Boca del Río, para la bendición de los primeros nichos mortuorios que formarán parte del más amplio y moderno edificio construído para tal fin en donde se consagra un lugar especial y digno para los difuntos.