De todos los aspirantes a la dirigencia nacional de MORENA, Alejandro Rojas Díaz Durán es el más autocrítico.

A través de las redes sociales, este consejero nacional y suplente del senador Ricardo Monreal está proponiendo a sus correligionarios de Xalapa hacer un evento masivo en la capital veracruzana el sábado 17 de agosto “para demostrar la fuerza de los ‘Protagonistas del Cambio Verdadero’” y para que los 7 millones de lopezobradoristas del país a los que se pretende excluir exijan que se abra la afiliación y la credencialización de todos y así puedan ejercer “su legítimo derecho constitucional de votar y ser votados en las elecciones de renovación de las dirigencias de nuestro Movimiento Nacional.”

“¡Vamos con todo, menos sin miedo!”, los arenga Rojas Díaz Durán, quien en su juventud militó en el PRI y formó parte de la Corriente Democratizadora que en 1987 encabezaron Cuauhtémoc Cárdenas y Porfirio Muñoz Ledo, quienes lideraron a miles de priistas que abandonaron las filas del partido tricolor inconformes con la imposición de Carlos Salinas de Gortari como candidato a la Presidencia de la República.

Desde hace un par de meses, Rojas anda recorriendo el territorio nacional para consolidar “una MORENA democrática”, demandando “una consulta popular para elegir a todos los dirigentes” de su partido. Recientemente estuvo en Xalapa y el puerto de Veracruz.

“¡Juntos Haremos MORENA!”, es su grito de guerra y bandera de lucha ante la cerrazón de Yeidckol Polevnsky, la secretaria general en funciones de presidenta del CEN de MORENA, la cual intentó suspenderle sus derechos como militante pero no logró conseguirlo porque el Tribunal Federal Electoral resolvió a favor de Rojas, el cual está enfrentando no sólo a Polevnsky sino también a Bertha Luján, presidenta del Consejo Nacional y aspirante también a la máxima dirigencia de MORENA.

Precisamente entre Luján y Polevnsky se ha dado un fuerte choque de intereses, ya que el domingo antepasado el Consejo Nacional de MORENA, que preside la madre de la secretaria de Trabajo y Previsión Social del Gobierno Federal, Luisa María Alcalde Luján, acordó ir al proceso interno de elección de dirigencias nacional y estatales con un padrón de 3.1  millones de militantes, mismo que se generó hasta diciembre de 2017, mientras que Yeidckol intentó cerrar la afiliación con los 317 mil 499 que el partido registró ante el Instituto Nacional Electoral cuando consiguió su registro en 2014.

Rojas, en cambio, está exigiendo que antes de la elección interna se afilie y credencialice a los 10 millones de simpatizantes que siguen apoyando al presidente Andrés Manuel López Obrador, entre los cuales –acaba de advertir irónicamente– se hallan varios diputados y senadores que supuestamente le acaban de firmar una carta de apoyo a Mario Delgado, coordinador del grupo legislativo de MORENA en la Cámara baja del Congreso de la Unión, y a quien Polevnsky estaría apoyando para dejarlo en su lugar.

¿Las ambiciones de poder fracturarán al partido de AMLO?