Alguien se le ocurrió que el canciller Marcelo Ebrard tiene encomendado el estado de Veracruz por parte del gobierno federal y que puede proponer funcionarios dentro del gabinete del gobernador Cuitláhuac García, haciendo un lado las funciones autónomas que existen en la Constitución sobre la independencia y soberanía de las entidades de la República Mexicana.
El intenso y complejo trabajo que realiza el secretario de Relaciones Exteriores en el piso 22 de esa dependencia, no figuran las grillas inventadas por políticos y columnistas afines a especular sobre cambios en el gobierno estatal.
Para el funcionario federal encargado de la realización del Tratado de Libre Comercio con Estados Unidos y Canadá y atender el grave problema migratorio entre otras vitales funciones, para el funcionario federal existen prioridades muy ajenas a las conductas enfermas de la clase política local.
Vamos a ir con quien tenemos que llegar
En el curso de una entrevista con el titular de la Fiscalía General de la República, Alejandro Gertz Manero sobre los casos de corrupción que han sido denunciados, responde: “Vamos a ir tras de quien tengamos que ir. Vamos a llegar hasta donde tengamos que llegar.” Una seria advertencia para los funcionarios panistas de la anterior administración en la caso de las fundadas acusaciones del Orfis que preside Antonio Lorenzo Portilla, del cual tiene voluminosos expedientes.
Se tiene conocimiento que en estos casos lleva un elevado grado de adelanto y el fiscal del país asegura que en todas las denuncias que siempre atiende, llega a los juicios con la firme intención de ganarlos.
Los salarios de los dirigentes políticos
A pesar de la caída electoral del PAN y con lo que se le viene encima con las denuncias en contra de gobernantes de pasadas administraciones estatales en el Comité Nacional del PAN se siguen gastando elevadas sumas de dinero en el pago de sus dirigentes.
Marko Cortés y Damián Zepeda cuentan con salarios muy superiores a los 200 mil pesos mensuales aunado al pago de extras sobre viáticos y apoyo de auxiliares. En la nómina figuran 260 ejecutivos con salarios que superan los cien mil pesos, entre ellos se cuenta el excandidato estatal perdedor Miguel Ángel Yunes Márquez.
Todos ellos tienen emolumentos que superan al del presidente de México, Andrés López Obrador. Los recomendados del excandidato presidencial Ricardo Anaya también tienen altas compensaciones.
Ya no podrán vivir en esta época de austeridad la bonanza financiera y el derroche que tuvieron con Vicente Fox y Felipe Calderón, donde se duplicaron los líderes sus salarios.
También en el PRI viven el descalabro financiero, todavía el año pasado recibió mil 689 millones para actividades ordinarias y específicas, ese año que se ubica como la tercera fuerza nacional electoral y tras la derrota electoral se redujeron al 50 por ciento por lo que recibirán 798 millones 894 mil pesos.
Con la visita de la dirigente nacional del tricolor, Claudia Ruiz, revivieron sus sueños hegemónicos del pasado, se olvidaron que no llegaron al medio millón de votos y que apuradamente llegan a ser una de las fracciones con menos senadores.
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