Al llegar enero, también los incrementos a la canasta básica, dando así un duro golpe a la economía de las familias. La gran pregunta es, sí existe tal preocupación por parte de los candidatos que aspiran a dirigir la presidencia, la gubernatura y así sucesivamente, puesto que, es éste, un tema realmente sensible y que atenta contra la dignidad humana de millones de mexicanos y veracruzanos que no cuentan con el suficiente ingreso para comprar lo básico y contrario a ello los servicios y productos se incrementan.
Es un tema social que pareciera ser relegado por quienes aspiran, enfrascados en escándalos absurdos, guerras de partidos, dimes y diretes y por supuesto frivolidades como atacar al contrincante, olvidándose del origen del éxito electoral, es decir, conocer el sentir de una población cansada y agobiada de políticos que no escuchan sus demandas, que no observan sus preocupaciones. La famosa cuesta de enero, la de cada año, en esta ocasión pareciera ser más aguda en Veracruz sí a ello lo sumamos la inseguridad, la incertidumbre económica y el reiterado discurso político que se suma a la inacción, justificada en un pasado reciente.
A los mexicanos, esos que perciben el salario mínimo, les llego el 2018 y con ello el aumento del precio en productos como la tortilla, el tomate, la cebolla, la papa, la zanahoria y a lo anterior se suma, el incremento en el gas y la gasolina, lo anterior en contrasentido con el triste aumento al salario mínimo, que apenas recibió un penoso incremento de 8 pesos y así lejos de los problemas de muchos y discursos políticos sin sentido social, están los que hoy o mañana les preocupa que llevaran a sus hogares.
Sin duda hay fallas, siempre las ha habido, permanentemente discursos de combate a la corrupción, de mejorar las condiciones de vida a través de los servicios de salud, calidad educativa, desarrollo económico, inversiones, etcetc, pero la realidad es que años pasan y lejos de las promesas de esos que obtuvieron el triunfo, las condiciones no mejoran pero sí empeoran, de ahí la escasa credibilidad y la apatía electoral. En su mayoría, al común denominador de la gente que se le pregunte sobre el pleito reciente de un político se mostrara indiferente, tiene mucho por enfrentar en casa, con los gatos diarios, la educación, entre otros como para detenerse a hurgar en el odio de personajes que buscan el poder.
Veracruz tiene hoy en día otro gran problema, además de tener una autoridad que cree, que la seguridad es un favor y no una obligación, pues se trata de un derecho humano amparado en la constitución; los robos, asaltos, agresiones se suman a la agonía de quienes además se enfrentar a la lucha diaria por llevar el sustento a sus hogares y a ello se adiciona el pobre actuar, donde todo se justifica acusando a la administración de Javier Duarte de haber dejado el estado en bancarrota y así se expresan todos los funcionarios, así lo hicieron durante 2017, también lo hacen los diputados, como sí los ciudadanos se alimentaran de acusaciones o mejoraran sus condiciones de vida con ello, sin duda existe una demanda, la de siempre, la incumplida: resultados. En fin, la maquinaria electoral ha arrancado y quienes van en busca de la gubernatura ya están encendiendo motores y lejos de una guerra de acusaciones y promesas incumplidas, habrá que recordarles que es lo que, a los veracruzanos les agravia para entonces saber cómo y de qué manera contribuir en su beneficio.
FernandoArtega en Veracruz, muestra animo priista
Por cierto que hablando de partidos políticos, ya prácticamente iniciada la contienda electoral, en el PRI, están los que ya se empiezan a mover, ayer por ejemplo, el exdirigente del PRI en el en el puerto de Veracruz, Fernando Arteaga Aponte, mostró iniciativa, pues a diferencia de la gran mayoría de priistas que se observan apagados y ajenos –esos que pareciera solo aparecen como rémoras cuando están en el poder- reunió a representantes de diversos sectores de la sociedad para exhortarlos a sacar la casta y hacer sentir su empatía y simpatía por quien será el candidato de su partido, José Yunes Zorrilla,.
Arteaga invitó a sus seguidores a actuar con optimismo y les expresó que no deben agachar la cabeza sino por el contrario, levantarla con orgullo y que pese a la campaña de desprestigio que se ha orquestado en contra del PRI, deben demostrar que son capaces de dar la gran batalla y salir victoriosos en junio próximo, ya que dijo, Pepe Yunes es sin lugar a duda el mejor candidato. El político porteño refirió mostrar así su lealtad en tiempos de crisis, esos donde las mayorías suelen esfumarse. No dudo en referir una situación complicada pero no imposible; lo muy cierto es que hoy pocos priistas mantienen ese impulso que les caracterizaba y ni que decir de los diputados federales y locales que actualmente a cambio de impunidad han decidido sumarse en apoyo a la actual administración. En fin que entre tanto alborotó, los ciudadanos determinaran, una vez más, por quien votar. ¡Así las cosas en nuestro Veracruz!