Desanima a los periodistas universitarios, que en este oficio se cuelen aquellos empíricos que se prestan a ser utilizados por las esferas oficiales para filtrar informaciones que tienen un trasfondo político interesado, dejando a un lado la objetividad de la información.

De antemano el lector de estas noticias manipuladas sabe quien está detrás del que escribe y el fin que se persigue. De allí que empieza a circular la versión maquinada de estos voceros mercantilistas del exgobernador veracruzano, Fidel Herrera Beltrán, que para la gubernatura de dos años se perfilan los nuevos diputados federales de Erick Lagos, Javier Herrera, Adolfo Mota y Jorge Carvallo.

Es notoria la preocupación del exgobernador Herrera Beltrán que no llegue al Palacio de Gobierno ninguno de los senadores priistas que se han comprometido con el electorado de castigar al culpable del drástico endeudamiento que afecta la economía de los veracruzanos. Ya no se diga si es alguien de la oposición quien logre la gubernatura, que en los momentos actuales de abierta impugnación de la sociedad por la inseguridad y desempleo en la entidad, es el que la tiene más amarrada.

En el remoto caso de que llegara a ser candidato del partido tricolor alguno de estos legisladores de la Cámara Baja, se tendría por seguro que perdería el PRI la próxima elección por el simple hecho de la herradura que poseen.

Ni pensarlo, si el presidente Enrique Peña Nieto llega a identificar a uno de estos personajes con el sello fidelista.

Hay otra extraña e inusual variante dentro del periodismo escrito, cuando a la clase política veracruzana les ha dado por ser articulistas de fondo, en algunos medios impresos tradicionales que aún conservan la línea editorial oficialista, ya que extravían su independencia pluralista y por ende hacen sospechar la propiedad accionaria de los mismos.

Estos escritores ocasionales, que no son periodistas, por su propia naturaleza política sus artículos mantienen la línea del servilismo habitual de la clase burocrática. No se estima que tengan lectores que les interese la obsoleta literatura del club de elogios.
A estas alturas, por favor.

Pecan de ignorantes

El diputado David Velasco apunta que deberían de aprovecharse las becas que existen para estudios en el extranjero, las cuales son de diez mil pesos mensuales, es decir de 576 dólares.

Como que el legislador local desconoce lo que cuesta la inscripción y las colegiaturas en las universidades norteamericanas o de otros lugares del mundo. Ya no digamos la pensión en algún campus, alimentación, transporte y los libros que se requieren.

Universidades “patito” no existen fuera de México y Veracruz.