Una vez más se dio la crisis de fin de semana que anuncio la salida del procurador de justicia Felipe Amadeo Flores Espinosa.

Aumentó la tensión nerviosa que desde hace algunos mese se vive entre algunos de los funcionarios de alto y mediano por el futuro de su desempeño laboral en la Procuraduría General de Justicia en la entidad que encabeza el prestigiado abogado Felipe Amadeo Flores Espinosa, personaje que lo único que le falta en la administración pública estatal es ser gobernador

La fortaleza del gobernador Javier Duarte, radica en su trabajo vertical y en su equipo de colaboradores en donde a algunos de sus colaboradores mediáticamente los han pretendido renunciar, pero no lo han podido debilitar a pesar de que también su coordinadora de comunicación social y vocera, Gina Domínguez, como una destacada periodista, se ha mantenido firme en el cargo ya que su prestigio y trabajo profesional está a prueba de intrigas y de campañas mediáticas, como sucede con el propio Amadeo Flores.


Flores Espinosa, en su largo desempeño en el servicio público como diputado local y presidente del congreso, diputado federal y vicepresidente de la Cámara de Diputados, director de seguridad pública y secretario de gobierno en tiempos de Agustín Acosta Lagunes, no se inmuta a lo que una vez más se da la famosa crisis de fin de semana al sonar las alertas que por más de enésima vez se escuchan las alarmas a lo que es ya crónica trillada de una salida anunciada en múltiples ocasiones, principalmente entre sus más cercanos colaboradores y de forma mediática.

Amadeo como se le conoce en estos lares, investido en la experiencia y en el conocimiento del derecho y específicamente del derecho penal al iniciarse desde muy joven en las lides jurídicas de alto nivel junto a personajes de la talla de Ignacio Morales Lechuga, el licenciado Felipe Amadeo Flores, dejó su cargo de vicepresidente de la cámara de diputados como un legislador federal por Huatusco, que ganó en una elección contra viento y marea, además del propio fuego amigo demostrando su habilidad en la operación política como ex presidente del CDE del PRI en esta entidad.

Al parecer hace algunos meses se sacó la rifa del tigre, y le convencieron de asumir la titularidad de la PGJE en relevo del famoso Reynaldo Escobar Escobar, quien a pesar de estar dispuesto a seguir ocupando la secretaría de gobierno en tiempos duartistas, se le cayó la posición de última hora.

Después, llegó al cargo de procurador, Flores Espinosa, quien a los meses de asumir el puesto se rumoró de su próxima designación para la secretaría de gobierno, cuando desde la cúpula del poder se decía que en el puesto en relevo de Gerardo Buganza, “se requiere a una persona enérgica como Amadeo”, algo que no se dio.

La paradoja en el caso de Amadeo Flores, el orgullo de Cotaxtla y un abogado que se ha caracterizado como una persona seria y de resultados en el ejercicio público, es que no lo han podido quitar del cargo procurador y ni tampoco lo ascendieron al cargo de secretario de gobierno, en donde se le ha visto como el más fuerte prospecto por su conocimiento del derecho y por la experiencia ya vivida en ese cargo en toda una época difícil en la entidad veracruzana.

Ante la presión de algunos medios informativos, los expertos dicen que Amadeo es garantía de experiencia y fortaleza jurídica en el gabinete duartista, y en igual forma como sucede en el mismo caso con Gina Domínguez, quien cumple con un trabajo profesional en la materia.

Por eso extraña que en el ruido mediático, se dice que en Coatzacoalcos por el caso del periodista Gregorio Jiménez, se pidió la renuncia de Namiko Matzumoto, secretaria técnica de la Comisión Estatal de Defensa de los Periodistas que preside Roció Ojeda, quien es verdaderamente la responsable de su conducción como presidenta de ese organismo, la también ex directora de la Facultad de Comunicación de la UV.

En la procuraduría de justicia el fin de semana, otra vez, entre sus más cercanos colaboradores, empezó de nuevo la crisis de la salida, una vez más las especulaciones en torno a una salida muchas veces anuncia y a quién llega al cargo en el relevo. Muchos en la crisis pretenden buscar los reacomodos laborales de quienes por años han estado enquistados en la dependencia, que hoy por hoy presenta resultados positivos en las estadísticas al reducir los índices delictivos y sacar el trabajo rezagado de algunos años a pesar de las limitaciones presupuestales en la dependencia.

Sin los grandes presupuestos y subsidios federales, la Procuraduría General de Justicia en Veracruz, con Amadeo Flores presenta un avance sin precedente alguno en los últimos años en tiempos del gobernador Javier Duarte, quien es víctima del acoso mediático de la agria crítica de los medios informativos opositores a su mandato, que no lo han podido desestabilizar y menos tumbar del cargo.

En la metáfora real, Amadeo Flores es inocente de las circunstancias políticas e ideológicas que se viven precisamente en un estado en donde está caliente la política, ese es el sentir de los expertos en el análisis de los acontecimientos estatales y nacionales, el tiempo es el que le dará la razón al también fundador de Vía Veracruzana, que desde hace varios meses se dice renunció al cargo de procurador, sin que le acepten su salida. Así las cosas.