Los expertos en el análisis de la política en estos lares, dicen que al presidente Enrique Peña Nieto, hay que concederle tiempo y el beneficio de la duda en sus primeras seis semanas de su mandato.

Se trata de que es pronto, para esperar resultados ante lo enmarañado que dejó al gobierno, en doce años del panismo con Vicente Fox y Felipe Calderón, a quienes culpan de destrozar algunas dependencias e instituciones.

Todo esto contraviene a la falaz postura del senador del PAN, Ernesto Cordero, quién en un afán de falso triunfalismo, aboga por los supuestos positivos resultados del mandato calderonista, que por supuesto no se ven ni se sienten entre los más de sesenta millones de pobres de este país.

Pero hay coincidencia entre los expertos en el asunto de que el gobierno de Peña Nieto, es plural, lo que no significa que se otorgue un reconocimiento a los mejores personajes para la ocupación del “pritanic”, en donde como si fuera el arca de Noé, han sido abordados los especímenes privilegiados de las diversas castas políticas del país de todos los colores y sabores.

Por supuesto, que la sociedad civil debe esperar al compromiso del entonces candidato de que se seleccionarían a los mejores, hablando genéricamente entre hombres y mujeres para ocupar los diferentes cargos en el gobierno federal, que poco a poco se diluyen los sueños y se comienza a navegar por los mares con mal tiempo y mucho frio.

En tanto, las suspicacias a la declaración patrimonial del presidente Enrique Peña Nieto, con muchos datos aportados en un esquema novedoso, pero aparece el rubro de las donaciones, y se cumple con esa parte de los formalismos y formulismos con el ejemplo y se empieza a dar el juego de la transparencia.

También, en el asunto de los sueldos de los titulares de las diversas dependencias del primer nivel, los salarios de gran dimensión en donde los hombres ganan más que las tres mujeres del gabinete que no llegan a ganar los 130 mil pesos mensuales, mientras que los demás fluctúan sus ingresos mensuales entre 150 mil y los 200 mil pesos mensuales, en una verdadera danza de los dineros, lo que significa que no existe un tabulador ordenado y que se respete, porque el propio presidente Peña Nieto, gana menos que algunos de sus subalternos.

Entre los poderes federales: ejecutivo, legislativo y judicial. así como en las diversas dependencias y organismos prevalece en un mundo de privilegios, prebendas y altos beneficios incuantificables que no están en el ámbito de las condiciones en donde el salario mínimo anda en un poco arriba de los tres mil pesos mensuales.

La desproporción de los sueldos de los políticos y funcionarios públicos, son una verdadera afrenta para un país con más de sesenta millones de pobres y otros tanto en la miseria extrema.

En este asunto, la gente clama por los compromisos de campaña de EPN, en primer orden la reducción de las tarifas eléctricas y a los costos de los combustibles gas y gasolina.

Los controles a las empresas de telefonía que lastiman a los clientes, como sucede en igual forma con los bancos con los altos costos e intereses de sus servicios verdaderamente increíbles en un clima democracia en donde prevalece la injusticia social y ya es tiempo de que los tres niveles de gobierno, comiencen cada quién por hacer su trabajo y desquitar los sueldos que no se pagan ni en los países ricos del primer mundo.

El tema de la impunidad debe ser la prioridad en el campo del derecho y la gobernabilidad, por eso será necesario que los puntos contenidos en el pacto por México, más los cinco ejes rectores del gobierno federal, se vayan entrelazando con los gobiernos estatales y los propios poderes federales.

Hay avance, dicen los analistas ni duda cabe, pero para ver los resultados hay que esperar, simplemente darle tiempo.

Con el Tiempo: Jorge Luis Borges: Después de un tiempo, uno aprende la sutil diferencia entre sostener una mano y encadenar un alma; y uno aprende que el amor no significa acostarse y que una compañía no significa seguridad, y uno empieza a aprender...
Que los besos no son contratos y los regalos no son promesas, y uno empieza a aceptar sus derrotas con la cabeza alta y los ojos abiertos, y uno aprende a construir todos sus caminos en el hoy, porque el terreno de mañana es demasiado inseguro para planes... y los futuros tienen una forma de caerse en la mitad.
Y después de un tiempo uno aprende que si es demasiado, hasta el calor del sol quema. Así que uno planta su propio jardín y decora su propia alma, en lugar de esperar a que
alguien le traiga flores.
Y uno aprende que realmente puede aguantar, que uno realmente es fuerte, que uno realmente vale, y uno aprende y aprende... y con cada día uno aprende.
Con el tiempo aprendes que estar con alguien porque te ofrece un buen futuro significa que tarde o temprano querrás volver a tu pasado.
Con el tiempo comprendes que sólo quien es capaz de amarte con tus defectos, sin pretender cambiarte, puede brindarte toda la felicidad que deseas.
Con el tiempo te das cuenta de que si estás al lado de esa persona sólo por acompañar tu soledad, irremediablemente acabarás deseando no volver a verla.
Con el tiempo entiendes que los verdaderos amigos son contados, y que el que no lucha por ellos tarde o temprano se verá rodeado sólo de amistades falsas.
Con el tiempo aprendes que las palabras dichas en un momento de ira pueden seguir lastimando a quien heriste, durante toda la vida.
Con el tiempo aprendes que disculpar cualquiera lo hace, pero perdonar es sólo de almas grandes.
Con el tiempo comprendes que si has herido a un amigo duramente, muy probablemente la amistad jamás volverá a ser igual.
Con el tiempo te das cuenta de que aunque seas feliz con tus amigos, algún día llorarás por aquellos que dejaste ir.
Con el tiempo te das cuenta de que cada experiencia vivida con cada persona es irrepetible. Así las cosas.