El estado de Veracruz se encuentra ya en una plataforma de lanzamiento hacia nuevos escenarios de desarrollos productivos, sí de progreso y de superación a las antiguas y anquilosadas inercias de los más de noventa años de los gobiernos priistas, que dejaron una estela de corrupción y degradación de la función pública.

El nuevo gobierno estatal de Morena con Cuitláhuac García Jiménez, se encuentra bajo la lupa muy rigurosa de quienes antes nunca se quejaron de todo lo que sucedía en el campo de la vida pública.

Los veracruzanos, quieren paz, progreso y tranquilidad, para retomar un rumbo nuevo de trabajo y productividad.

Las quejas en torno a quienes agudizan la mirada a todo lo que se mueve de forma mediática, sin duda es que son parte de una ola que se tiene que equilibrar y superar, porque poco a poco la gente es la que da cuenta del cambio.

En el caso del gobierno estatal se están dando pasos seguros en la administración pública y pocos son los que reconocen sobre el cumplimiento de los compromisos financieros a pagos de nóminas, pensionados y de las ministraciones a las diversas dependencias.

La dinámica se trabajo va en todos los órdenes y poco a poco en seis meses se están dando acciones que contribuyan a la gobernabilidad y a la seguridad como un demanda básica y elemental de la población, sobre todo en algunas zonas en donde se está restableciendo el orden en base a las acciones conjuntas de los tres niveles de gobierno.

Las disputas entre las áreas, la gente cree que son normales y parte de una vida democrática, además de autonomía, por lo que se deben de dar acuerdos entre todas las áreas del gobierno del antes y el ahora.

Todos unidos en torno a un mismo objetivo que es el de servir a los veracruzanos y sin diferencias, ese de ser el principio rector de la gobernabilidad.

El estado de Veracruz, está entrando a una economía pujante ya con el nuevo puerto ampliado y con los programas del gobierno federal puestos en marcha.

Los políticos deben saber interpretar la filosofía de gobierno y de trabajo del presidente Andrés Manuel López Obrador, de estar en la palestra del trabajo siempre y sin disputas innecesarias para no gastar pólvora en infiernitos.

Por favor, no hay que desgastarse en asuntos triviales o tribales, esos tiempos ya pasaron de moda. Ojala y ahora todos los funcionarios públicos entiendan que la misión, visión y valores, la determina el pueblo y hay que obedecer los mandatos populares, aunque luego de quejen del populismo.

En otro asunto, en Boca del Río, el alcalde Humberto Alonso Morelli, hace historia y pone el ejemplo al dar pauta a acciones importantes en materia de servicio público con un ayuntamiento que genera avances que son un precedente a nivel nacional, sobre todo en el rubro de la seguridad con la adquisición de patrullas de última generación tecnológica.

Morelli, instaló el viernes el cabildo infantil y juvenil, en donde con toda formalidad los futuros ciudadanos vieron y conocieron todo en relación al funcionamiento del cabildo y de sus áreas. Así las cosas.