No soy policía, le dijo el gobernador Miguel Ángel Yunes al periodista Ciro Gómez Leyva este lunes, cuando le preguntó sobre la publicación de esta semana hecha por la revista Proceso en el sentido que llegaba un policía con perfil de investigador y Ministerio Público al poder en Veracruz.
Atajó enseguida al comentar que no le incomoda ni le ofende porque también hay policías buenos en alusión a que pudiera ser comparado con un policía malo.
Luego, él mismo le dio su interpretación al artículo del semanario de fuerte penetración en la opinión pública nacional, al mismo tiempo que dijo aún no haberlo leído: si lo dicen porque me he dedicado a confiscar los bienes públicos que se robaron y son de los veracruzanos, lo seguiré haciendo.
El artículo del Semanario de circulación nacional sintetiza así la trayectoria del mandatario: Tránsfuga del PRI, alfil de la maestra Elba Esther Gordillo, polémico ex diputado, Miguel Ángel Yunes Linares por fin es gobernador, tras años de obstinación. El jueves 1 rindió protesta. Antes de hacerlo, pactó con dos duartistas y se atribuyó sus primeros logros, que anunció ese día. Y reiteró su decisión de meter a la cárcel a sus predecesores: el prófugo Javier Duarte y el también ex gobernador Fidel Herrera, a quienes acusa de corruptos. El antes “innombrable opositor” es hoy un gobernador temido… pero también lo envuelve una cauda de denuncias.
Y más adelante explican que para lograr llegar a su anhelado cargo, se ha valido de una campaña basada en el enjuiciamiento legal, sobre todo de su experiencia como Ministerio Público (MP), juzgador fiscal e investigador policial.
El reportaje pareciera irse a fondo en la descripción y “habilidades” del gobernante, para señalar que “indagó, interrogó, escudriñó en bases de datos nacionales e internacionales, viajó él mismo al extranjero y operó en la prensa de cobertura nacional, electrónica, televisiva e impresa”.
A esto, Yunes diría al periodista Gómez Leyva que de policía pasaría a ser un mandatario preocupado por la seguridad del estado y por ello, el domingo en la noche sostuvo la segunda reunión con representantes de las fuerzas federales –Marina, Defensa Nacional, Policía Federal, Procuraduría General de la República-: "la primera reunión fue la noche que llegué a gobierno", explicaba en el noticiero matutino.
Y fue más directo sobre el artículo periodístico: "Yo soy un ciudadano comprometido con su país. Si se refieren a que hice una investigación que permitió recuperar para los veracruzanos mil 200 millones de pesos, lo tomo como un elogio".
Para algunos personajes de la política estatal, Miguel Angel deberá preocuparse inmediatamente por los rubros urgentes, atender y frenar el desempleo, mejorar la certidumbre a las empresas, abatir los índices de inseguridad, y sobre todo garantizar el pago de empleados estatales, policías, doctores, pensionados, maestros.
Si bien es importante recuperar lo que pudieran haber desviado los gobernantes y funcionarios de los últimos dos sexenios, hay prioridades para los veracruzanos, muy a corto plazo, lo que no debe olvidar el Ejecutivo.
La formación la tiene, sin duda. Quizá eso explique el nombramiento de un personaje falto de carácter y capacidad en la secretaría de Seguridad Pública como Jaime Téllez Marié, pues eso permite al mandatario manejar esa área con toda su perspectiva y autoridad.
Y aunque pudiera negarlo, Yunes, si bien el caso lo amerita, se ha visto como pez en el agua en el tema de seguridad tras los recientes hechos violentos donde la Marina, Ejército y policía estatal se enfrentaron a un grupo armado en el sur de Veracruz con un saldo de 18 muertos en el municipio de Jesús Carranza. “Vamos a ir tras ellos” fue la frase del gobernador veracruzano en un perfil meramente policial. Para nadie es un secreto su actuar en el gobierno de Patricio Chirinos cuando él prácticamente era quien mandaba en la entidad.
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