@magzamu

Ahora que el Gobernador Javier Duarte de Ochoa vive en el Fraccionamiento Club de Golf, el aeropuerto de El Lencero se ha convertido en otro despacho para el, ahí sostiene reuniones, acuerdos, conferencias de prensa y así Duarte va y viene. Dicen los rumores que ahora despacha desde ahí para salir volando en cuanto la situación se complique, lo cierto es que lejos de todo ello, los trayectos del Mandatario ahora son más cortos y prácticos.

Es decir no es tan verídica la información que dice que ya prácticamente habita en el aeropuerto y suena absurdo el hecho de que el aún Gobernador se fugue desde ahí, como si se tratara de una película de ciencia ficción; prácticamente las reuniones de Duarte se celebran ahí cuando tiene un vuelo, entonces antes o después preside encuentros.

Y es que tomando en cuenta el repudio social que existe en su contra, sabe que esa es la mejor manera de evitar contratiempos con las manifestaciones y protestas que sus acciones han ocasionado, como por ejemplo la exigencia de pago a proveedores, así es que Duarte ha dejado la ciudad capital y se ha ido al vecino municipio de Emiliano Zapata, evitando así el sentir ciudadano. Mientras la ciudad se vuelve un daos, el está fuera de ella.

Los nuevos vecinos del Mandatario se asombraron con su llegada al Club de Golf, dicen algunos de ellos -que pidieron el anonimato por obvias razones- que ahora se sienten más vulnerables y consideran que hasta su privacidad se ha visto trastocada, pero no les queda de otra que aguantar pues ya solo faltan unas 12 semana para que se vaya.

Por cierto que hablando de priistas, otro al que ya casi le cantan las golondrinas es a Amadeo Flores Espinosa como Dirigente Estatal del PRI, pues a la dirigencia nacional y al propio gobierno federal, le urge darle rumbo a su partido en la entidad, donde urge un liderazgo y desde la estrepitosa derrota priista todos andan dispersos y sin dirección.

Sin duda se trata de un arduo trabajo, pues no hay mucha tela de donde cortar para designar al nuevo dirigente estatal, por lo pronto es cuestión de días que el Comité Ejecutivo Nacional envíe a un nuevo delegado nacional para que se inicien los trabajos de renovación de la dirigencia.

Se espera que a más tardar en septiembre el camino este avanzado en cuanto a la renovación; por lo pronto uno de los que anda movido es el diputado federal Jorge Carballo Delfín, el cual de llegar seguramente dará mucho de qué hablar empezando por el cúmulo de propiedades con las que ahora cuenta. No hay mucho para donde voltear y los priistas lo saben.

Mientras tanto aquí en Veracruz continúan las bajas administrativas rumbo al cambio de gobierno, pues otro de los que ya se fue, es el ex tesorero de Javier Duarte, José Antonio CharaMansur, quien apenas hace unas horas renunció a la Delegación de la Secretaria de Economía.

Y es que como se recuerda, el funcionario fue exhibido por contar con al menos 16 propiedades en Estados Unidos, con la finalidad dijo de “hacer frente a falsas imputaciones sobre mi persona y sobre mi familia”, ¡así con el cinismo del personaje!

El funcionario fue acusado de poseer el citado número de propiedades en Texas, Estados Unidos, cuyo valor aproximado ronda los 6.7 millones de dólares. Los terrenos se encuentran en la zona residencial The Woodlands en las afueras de la ciudad de Houston, de acuerdo con un reporte del diario Reforma.

Del total de las propiedades, 12 de ellas están registradas por M1 Woodlands, LCC, asociación creada en el 2009 en Texas y de la que el ex secretario es uno de los principales socios. Como se ha difundido Mansur no es el único funcionario de la administración de Javier Duarte que se ha visto involucrado en la posesión de números bienes raíces tanto en México como en Estados Unidos, lo mismo se reveló de Arturo Bermúdez Zurita, quien renunció el pasado 4 de agosto a la Secretaria de Seguridad Pública para esclarecer su patrimonio personal, que incluye 19 predios. ¡Así las cosas en Veracruz!