El nombre de don Fernando Gutiérrez Barrios, infunda respeto y entrañables recuerdos para el más querido ex gobernador de Veracruz, por cierto, la tierra más politizada del país. El político leyenda trasciende por el gran legado que dejó a las nuevas generaciones de jóvenes, hoy convertido en leyenda viva.

Defender su nombre y memoria no significa, juzgar a quienes fueron sus colaboradores y amigos en estas tierras veracruzanas y en todo el territorio nacional, que fueron muchos y todos respetables.

Claro que don Fernando siempre será noticia y por lo mismo se le recordará por siempre en estos lares. Decía el profesor Carlos Hank González, a su paso por Veracruz en plena campaña política de FGB, “es un hombre de mano suave, pero muy firme”.

Así que para honrar su memoria, sólo basta decir su nombre y con ello, las anécdotas y todas las enseñanzas que dejó un hombre que hizo de la actividad política, la más grande virtud de un ser humano para servir con dignidad y pasión a sus semejantes.

Al lado de don Fernando Gutiérrez Barrios, su esposa doña Divina María Morales de Gutiérrez Barrios, quién con su compañero de vida formó una familia en la que hoy hijos y nietos, son el ejemplo testimonio vivo de quién prodigo amistad y grandes valores, acordes al pensamiento liberal a quienes le rodearon, o tuvieron la fortuna de tratar con él.

Por cierto, nadie olvida que entre los pocos veracruzanos que le acompañaron a don Fernando Gutiérrez Barrios en su equipo de colaboradores como secretario de gobernación, destacan el doctor Ramón Ferrari Pardiño y el comunicador Armando Zavaríz Vidaña. Ambos egresados de la Universidad Veracruzana. Y que sea esta la oportunidad para dar doble felicitación al famoso titular de la CODEPAP, quién ayer domingo celebró a sus señores padres, don Antonio Ferrari Alemán y doña María de Jesús Pardiño, quienes celebraron ayer su onomástico juntos en familia, como ha sido desde hace sesenta años.

También destacan entre dos grandes amigos de FGB, el maestro José Pablo Robles Martínez y el mayor Armando Félix.

El mundo volverá sus ojos a Veracruz por su compromiso con los más necesitados, por ello venimos a sembrar la semilla de un gran proyecto con visión social, para mejorar la vida de los veracruzanos de escasos recursos, afirmó el Premio Nobel de la Paz, Muhammad Yunus, al destacar que la entidad es la primera en México en establecer un convenio con Yunus Social Business, y el cuarto en Latinoamérica, después de Colombia, Haití y Brasil.

“Todas las ideas que provengan de Veracruz, así sea de sus regiones más remotas, podrán servir de ejemplo al resto de los estados”, aseveró, y se congratuló por la alianza que realizan sus negocios sociales con el gobierno de Javier Duarte de Ochoa, para abrir en la entidad nuevas vías que permitan un mayor desarrollo social a través del impulso a esquemas financieros y empresariales diseñados para personas en rezago social.

Ofreció una conferencia magistral en la Fortaleza de San Juan de Ulúa, en donde explicó cómo en 1976 nació ese esquema en su natal Bangladesh, para crear sistemas de financiamiento y rescatar de la pobreza hasta nuestros días a más de 8.5 millones de usuarios de su Banco Grameen, lo que equivale a la población de Veracruz, que solicitan créditos que son pagados al cien por ciento, en su mayoría por mujeres pobres.

Expresó su beneplácito al pactar su participación en Veracruz, un estado que, dijo, es la mitad de Bangladesh, país que sin embargo tiene una población de 106 millones de personas, cuyos negocios sociales exitosos no buscan crear riquezas sino resolver el problema de las necesidades y carencias de la población de escasos recursos y en pobreza extrema.

En Bangladesh nos propusimos abatir la pobreza para 2015, y es posible mediante los microcréditos; actualmente sus programas van cumpliendo anticipadamente con los altos objetivos que se han trazado. “Cumplimos la meta dos años antes: Bangladesh alcanzará las ocho metas de desarrollo del milenio”. Es posible, y Veracruz lo puede lograr, con un cambio de mentalidad y el esfuerzo de todos.

La visión social de los negocios realizados por Muhammad Yunus ha permitido elevar la calidad de vida de millones de personas, y en Veracruz existen acciones similares que buscan abatir la pobreza a través de mecanismos con un origen profundamente social.

El Premio Nobel, recordó que, una vez aceptada la invitación del gobernador Javier Duarte, pondrán en marcha el proyecto en dos fases: por un lado, crear empresas incubadoras y, por otro, empresas que cuenten con los fondos económicos.

Lo importante es “plantar la semilla y ser pacientes para ver los resultados, porque no siembras hoy y al día siguiente comienzas a cosechar los frutos”, y aseguró que tan pronto como se inicia la primera etapa comienza la segunda.

El método es recibir, analizar y celebrar cada idea, cada planteamiento de toda persona que se acerque a las empresas y no esperar que alguien en particular llegue con algún planteamiento específico. “Lo único que esperamos es que la gente venga con sus ideas y así podremos empezar”.

Muhammad Yunus aseguró que los resultados positivos que se den en Veracruz podrían replicarse en otras entidades, pero aplicar esos esquemas o no depende de cada estado. “Cualquier problema que se focalice aquí como un problema local, cuando lo analicemos, el mundo volverá sus ojos a Veracruz para ver qué está sucediendo con esos resultados”.

Se dijo encantando con la belleza de Veracruz y, sobre todo, agradecido por el liderazgo representado por el gobernador Javier Duarte, quien además tiene esta paciencia y este coraje de enfrentar las cosas; estoy contento con la gente que lo sigue, la gente que trabaja y reconoce su liderazgo en el estado de Veracruz.
Dos miembros de la dinastía López Gómez, celebraron su cumpleaños este 20 de julio, el ingeniero Víctor Leonel y el doctor Enrique López Gómez. Muchas felicitaciones para ambos. Así las cosas.