La elección presidencial

La celebración del cumpleaños de Felipe calderón, se convirtió en una autentica “fiesta”, pero política en donde se difunde como nunca antes se había visto el festejo del presidente de la república, ahora con un cariz sucesorio y en donde en la foto aparecen juntos dialogando Ernesto Cordero, secretario de hacienda y el más fuerte aspirante a la candidatura presidencial panista junto al “jefe” Diego Fernández de Ceballos, también en otra época un fuerte candidato a la presidencia del país.

En el PAN, aun no está perfectamente definida la candidatura de Cordero, y por lo mismo como una cortina de humo se asoma el asunto del candidato ciudadano que no es nada más que el reconocimiento a la debilidad electoral en el panismo.

La candidatura de Cordero, para los analistas políticos, representa la mejor opción del Partido Acción Nacional, toda vez que el famoso secretario de hacienda y delfín del calderonismo, lo ven con buenos ojos los principales sectores financieros del país porque ha logrado controlar cuando menos, los embates de los feroces efectos problemáticos y serios en la actualidad de la economía global y esto representa un verdadero capital político individual y ganado personalmente a pulso por el joven funcionario federal.

En otro escenario, pero en el estado de México, el gobernador Enrique Peña Nieto, logra su anhelado acercamiento con el senador Manlio Fabio Beltrones, quién tendrá un lugar preponderante en la campaña del futuro candidato presidencial del PRI y en donde el humo blanco fluye ya desde hace varios meses y como en el pasado ahora, todos los caminos conducen hacia la entidad mexiquense en donde se aglutinan todas las fuerzas de la unidad priista y quienes no están cercanos, ahora buscan a como dé lugar estar en la mirada del próximo abanderado priista a la presidencia de la república.

En el PRI, la fortaleza del dirigente nacional, Humberto Moreira, ha sido de excelentes resultados en su pasada prueba electoral en la que logró conservar la posición de la gubernatura en el estado de México y con esto se sube a la ola que, supuestamente tiene ya el priismo con un pie adentro de los Pinos.

Aunque aclarando amanece, para los expertos, en la elección presidencial del 2012, las preferencias favorables al famoso priista Enrique Peña Nieto en más de un 40 por ciento, sobre su más cercano competidor que es el también famoso “Peje” André Manuel López Obrador, a quién su amigo el actual jefe de gobierno capitalino, Marcelo Ebrard en un sentido democrático le disputa la candidatura y que entre los perredistas se decidirá con una encuesta “abierta” que será la definición para postular uno u otro. Pero la realidad es que al político tabasqueño nadie le puede arrebatar la posibilidad de volver a ser candidato presidencial y precisamente como Cuauhtemoc Cárdenas, participar con firma voluntad de triunfo.

La verdad es que tarde que temprano según los analistas, no tardando tendrán la oportunidad de llegar a la presidencia del país algún gobierno de izquierda, aunque se desconoce si en el 2012, los electores se pronuncien a favor del Peje, del continuismo panista o del retorno del PRI al poder presidencial, esta es la incógnita a descifrar, pero sólo basta revisar los escenarios para que se abra un poco el horizonte y se pueda anticipar algo del resultado que se vislumbra para la elección más disputada de todos los tiempos.

Aquí en primer término la maquinaria priista anda bien aceitada con el líder priista Humberto Moreira, pero en algunas entidades el juego político se pondrá en duda en donde los operadores estarán a prueba y se espera que el resultado de una verticalidad política les favorezca el resultado, pero está muy difícil que en el fortalecido PRI de los tiempos actuales en donde no se da el respeto a los compromisos electorales y en algunas entidades existen serios problemas financieros, esto represente un obstáculo natural para sus acuerdos.

También, ya se ve una reconciliación entre la poderosa dirigente magisterial Elba Esther Gordillo y Felipe Calderón, por lo que una vez más, la líder del SNT al parecer va a operar para el PAN como dicen que ahora ya lo está haciendo en Michoacán a favor de la famosa “Cocoa” Maria Luisa Calderón.

Por lo que los escenarios para el próximo año en el país, serán de verdadera disputa entre el PRI y el PAN en donde el PRD en alianza con el PT y el ahora Movimiento Ciudadano antes Convergencia, sólo podrá levantar en la persona de López Obrador, siempre y cuando se quite a tiempo la imagen de mesías y logre un pacto reconciliatorio con los ricos del país, algo que se ve más que imposible.

Así es, que se repite la historia y la misma estrategia como en los tiempos de Vicente Fox, se le ve a Felipe Calderón, convertido en jefe de campaña de Cordero y de esa forma aunque muchos lo ven lejos, el PAN tiene la posibilidad de conservar el poder a través de los acuerdos cupulares, la guerra sucia y las descalificaciones como ha sido su estilo.

En el análisis frio en conclusión el PRI la tiene ganada con todo y la unidad priista, pero para los expertos está claro que la presencia de los hermanos Carlos y Raúl Salinas como operadores del priismo a favor de la campaña de Peña Nieto, es un factor que sin lugar a dudas más que afectar, dará un amplio beneficio al candidato presidencial, porque conocen de la operación política y en la que tienen mucha experiencia del pasado.

Y en el caso de Andrés Manuel López Obrador, estará por verse alguna posible sorpresa en donde por fin los dueños del dinero y del gran poder económico concentrado en unas cuantas familias se decida a darle el apoyo al tabasqueño que anda en campaña desde que perdió con Felipe Calderón en la muy disputada elección presidencial del 2006.

Luego entonces, aunque los expertos se niegan a dar una visión real de los electores que por sí mismos esconden la tendencia del voto con celo y en donde nadie se atreve en las empresas de opinión pública a proyectar un posible resultado, aunque con todo y el voto de castigo para el PAN, no se descarta que con un buen trabajo de estrategia y de acuerdos logren conservar el poder, debido a que existe mucho escepticismo al retorno del PRI al poder presidencial y en igual forma para el candidato del partido, Andrés Manuel López Obrador, pero que tiene varios millones de seguidores.

El resultados entonces como sucedió en la elección presidencial del 2012, estará sujeta al vaivén de los gobernador de los diversos colores políticos, que como en aquella ocasión el último día, las llamadas de Elba Esther a los mandatarios estatales y que le hicieron caso, fueron definitivas para el triunfo calderonista, al que luego el PRI, le dio el apoyo total para su toma de protesta en el congreso y con el apoyo de la televisión, asumió el poder a pesar de las protestas perredistas.

Ahora el PAN, ya no tiene el apoyo del PRI y está por verse la postura del PRD, por eso para los especialistas, la elección presidencial 2012, aun no pinta para ningún color. Así las cosas.