“La ignorancia es atrevida” reza una coloquial frase ¡y vaya que lo es!

Ayer algunos medios de comunicación dieron cuenta de cómo en el Congreso de Veracruz -donde hoy lleva las riendas el Partido Acción Nacional- se le impidió el acceso a integrantes del colectivo “Buscando a Nuestros Desaparecidos” a la sesión de la diputación permanente, celebrada ayer, por considerar que al portar éstos camisas rotuladas con el rostro de su familiar desaparecido, representaban un riesgo.

Es decir, en el Congreso del estado -comandado por Sergio Hernández Hernández como Presidente de la Junta de Coordinación Política y por María Elisa Manterola Sáinz, como presidenta de la Mesa Directiva- las víctimas indirectas, como en éste caso los familiares de los desaparecidos, son un riesgo latente y por lo tanto se usa a empleados de seguridad para impedir el acceso a un recinto de carácter público y que precisamente alberga a los representantes populares, esos que se supondría son la voz de los ciudadanos.

Es evidente la ignorancia y el desconocimiento respecto de los derechos humanos y el trato que se le debe brindar a las victimas indirectas o potenciales que sufren la desaparición de un familiar; el Congreso del Estado ahora revictimiza y además violenta no solo lo establecido en la Ley General de Víctimas, sino lo determinado en el artículo primero de la constitución que refiere:

“En los Estados Unidos Mexicanos todas las personas gozarán de los derechos humanos reconocidos en esta Constitución y en los tratados internacionales de los que el Estado Mexicano sea parte, así como de las garantías para su protección, cuyo ejercicio no podrá restringirse ni suspenderse...”.

Luego entonces para los que mandan en el Congreso, son las víctimas un peligro y no así los delincuentes y entonces se le discrimina por su situación y además se les violentan sus derechos sin importar lo también establecido en los tratados intencionales de los que México es parte y que las autoridades están obligadas a respetar.

El artículo primero de la Ley General de Víctimas, es claro al referir: “La presente Ley obliga, en sus respectivas competencias, a las autoridades de todos los ámbitos de gobierno, y de sus poderes constitucionales, así como a cualquiera de sus oficinas, dependencias, organismos o instituciones públicas o privadas que velen por la protección de las víctimas, a proporcionar ayuda, asistencia o reparación integral”.

“Las autoridades de todos los ámbitos de gobierno deberán actuar conforme a los principios y criterios establecidos en esta Ley, así como brindar atención inmediata en especial en materias de salud, educación y asistencia social, en caso contrario quedarán sujetos a las responsabilidades administrativas, civiles o penales a que haya lugar”.

Pero los ignorantes diputados que dieron la orden a los elementos de seguridad del Congreso desconocen -como es costumbre-, los ordenamientos legales y pisotean los derechos de víctimas, que buscan en éste poder como en otros, ser escuchados y atendidos como lo ordenan dichas disposiciones.

Cuando el escándalo amenazaba con acrecentarse producto de la inconformidad de integrantes del Colectivo, se dio la orden de que se les diera acceso a unos cuantos, pero con la advertencia de que no molestaran o incomodaran a los diputados.

¡Qué tal! Así se las gastan en el Congreso de Veracruz.

Ahí donde se “legisla”, es precisamente donde se pisotean las normas. Terrible.

Por cierto que hablando de víctimas e inseguridad, ayer mientras el Gobernador presumía cifras alegres en cuanto a temas de seguridad, Alemania lanzó una alerta donde advertía a sus ciudadanos el riesgo de visitar algunas ciudades de nuestro país, donde lamentablemente, el estado de Veracruz está incluido. ¡Tremendo. Así las cosas en nuestra entidad!