Columna: Se dice que...
Se dice que...
El operador de todos los partidos
La habilidad de operador polÃtico del actual gobernador Miguel Yunes Linares no existe la menor duda y eso le ha permitido subsistir durante varios sexenios sin importar que partido esté en el poder o con qué presidente de la República haya que trabajar.
Para estas elecciones es su prueba de fuego para demostrar que con dinero y la fuerza polÃtica del gobierno estatal se pueden ganar los comicios de los ayuntamientos más importantes del estado.
En esta tarea no hay lÃmites en cuanto a sobornar o hacer alianzas con quien se pueda o se deje. Si hay que comprarlos o someterlos, la mejor prueba es su coalición con el nuevo PRD, un enemigo a ultranza durante todo el desarrollo de su vida pública. Es bien sabido que la ambición tanto puede hacer volar como arrastrarse. Conoce perfectamente las debilidades de los veracruzanos en cuanto atender cualquier llamado que sea interesante para sus intereses económicos o polÃticos, sin importar principios, dignidades o ideologÃas.
El caso de la exdiputada de Morena, Eva Cadena, es una prueba palpable de lo que se puede hacer para exhibir a sus principales enemigos Lopezobradoristas en la entidad veracruzana tanto para el PAN como para el gobierno de Peña Nieto.
Se habla en la zona sur, que quien manejó otorgarle dinero y grabar a la ex aspirante de Morena para la alcaldÃa de Las Choapas fue el exalcalde priista de Coatzacoalcos, Rogelio Lemarroy, socio de Yunes y el diputado federal también del partido tricolor, Erick Lagos, quien tiene años de trabajar para los azules.
Lo interesante del gobernador panista es cómo puede trabajar con personas que supuestamente fueron entrañables amigos de Fidel Herrera a quien odia, con odio jarocho.
Numerosas versiones que corren en la ciudad de Xalapa es que también se reunió con el lÃder estatal de Morena, Manuel Huerta, para que designaran candidatos a modo para que ganaran los azules, aprovechando el pleito que sostiene con la diputada federal Norma RocÃo Nahle, quien ha tenido que sortear la habilidad, el tejemaneje y artimañas que posee Huerta Ladrón de Guevara, quien se ha despachado con la cuchara grande en la designación de candidatos de Morena.
Por lo que no se descarta la confidencial relación que pudieron tener con el gobernador panista, que sabe amarchantar y traficar con viejos polÃticos.
El conocer las debilidades del ser humano ha sido el doctorado de Yunes Linares. Es un encantador de serpientes. El choleño trabaja desde los tiempos del entonces gobernador Rafael Hernández Ochoa que lograra la gubernatura a través de su comadre, MarÃa Esther Zuno de EcheverrÃa, a pesar de la oposición del lÃder nacional del PRI, Jesús Reyes Heroles, que se habÃa opuesto a que llegara Manuel Carbonell, quien era el candidato del gobernador Murillo Vidal.
Yunes Linares sabe lo que es sufrir el acoso de un gobierno estatal, cuando llegó AgustÃn Acosta Lagunes y Morales Lechuga, metieron a la cárcel a su compañero en el gobierno, José Luis Lobato y lo persiguieron junto con el entonces alcalde de Xalapa, Carlos Padilla Becerra.
No les quedó más que irse a refugiar a la ciudad de México.