Magda Zayas Muñoz @magzamu

En la Secretaría de Finanzas y Planeación las filas son largas y la tensión se incrementa, sobre todo en el área de caja, donde los empleados del área y el propio titular –Miguel Trujillo Quintana- se encuentra tan estresado, que ya no duda en levantar la voz a los proveedores; son los trabajadores se oficinas cercanas, testigos de esas constantes discusiones bochornosas.
Lo más reciente -aseguran los asalariados- fue el escandaló que protagonizó él y sus colaboradores cuando apoderados de empresas reclamaron que un día antes, los depósitos se habían reflejado en sus cuentas bancarias, con cantidades que oscilaban entre 2 y 4 millones de pesos, pero horas más tarde cuando intentaron realizar el retiro, pues resulta que dicha cantidad había desaparecido ¡así como lo escuchan!
La salida fácil del servidor público fue acusar a los ahí presentes, de que sus empresas, formaban parte de esas fantasmas que hoy son un gran escandaló a nivel nacional, la respuesta de los quejosos fue que sí fueran parte de la lista que él les endilgaba, de tontos se pararían por ahí para reclamar el pago.
Y así los días en Finanzas, donde la simulación de depósitos continua, al parecer por instrucciones del titular Antonio Gómez Pelegrín; los afectados indignados han decidido que tomaran medidas, pues el fraude no consiste en mil o dos mil pesos, sino en millones que supuestamente les depositaron y de inmediato les retiraron ¡así se las gastan en SEFIPLAN!
Y ya que de escándalos hablamos, la novedad de la semana que termina en la acusación de la Fiscalía General del Estado –que suena más a teatro- en contra del ex secretario del Trabajo, Gabriel Deantes Ramos y del ex secretario de Seguridad Pública, Arturo Bermúdez Zurita por el presunto delito delitos de enriquecimiento ilícito, tráfico de influencias y abuso de autoridad.
La situación de estos ex funcionarios ha sido exhibida reiteradamente, por hechos como el adquirir propiedades en zonas habitacionales exclusivas de los Estados Unidos, como es el caso de Bermúdez; se ha referido que es dueño de varios inmuebles en la zona residencial de Woodlands, Estados Unidos.
En el caso de Gabriel Deantes, también se le ha señalado por presuntos desvíos de recursos del erario a su paso por diferentes dependencias del gobierno estatal y aquí en la capital del estado son conocidas sus propiedades y negocios que van desde edificios con lujosos departamentos en renta, hasta restaurantes y demás inmuebles.
El miércoles por la noche, se observó a Deantes deambular por la Fiscalía General del Estado acompañado de un abogado y así un nuevo escándalo ha iniciado, con el cual Luis Ángel Bravo pretende vestirse de imparcialidad e intentar así permanecer en el cargo ¡qué tal con el funcionario que ya no ve lo duro sino lo tupido!

Ahora resulta que todos intentan vestirse de honestidad e imparcialidad, como también es el caso del Contralor General del Estado quien en la búsqueda por permanecer en la nómina gubernamental, ahora sí exhibe, señala y consigna; por cierto que es la oficina del originario de Pánuco, otra de las que se encuentran saturadas de servidores y ex servidores públicos que buscan la liberación de la dependencia.
Algunos salen de la oficina de palacio felices con su cartita que refiere han quedado liberados de cualquier observación, pues han solventado las observaciones realizadas, mientras que otros no evitan su cara desencajada o bien de enojo, pues la cartita de “aquí no pasó nada” nada más no llego. ¡Así las cosas en nuestro pobre Veracruz que no deja de ser noticia entre Duarte en sus secuaces!