La ciudad de México, la capital de la República Mexicana, es el mejor indicador político que tiene el país. En las pasadas elecciones tres de cada cuatro capitalinos votaron por un partido diferente al que gobierna la gigantesca metrópoli . Ha sido el peor revés en la corta historia del Sol Azteca, que había reelegido en cuatro sexenios al Jefe de Gobierno de la gran urbe.

El ciudadano del Distrito Federal es posiblemente el mejor informado, ya que allí se concentran los principales medios de la nación. Los periódicos de circulación nacional, las estaciones de radio más importantes y los canales de televisión que inundan al país.

El mayor número de votos de los capitalinos se lo dieron al nuevo partido Morena. Después de 15 años la Asamblea Legislativa del Distrito Federal cuenta con una nueva conformación.

En dicha legislatura se unieron el PAN, PRI y PRD para contar con una mayoría artificial, lo que viene a comprobar el temor que les inspira conocer el resultado de las últimas encuestas, las cuales colocan a AMLO en la delantera para las elecciones presidenciales del 2018, las mismas que ponen a Morena como puntero para los comicios de la ciudad de México.

Disimulada denuncia.

De acuerdo a la última encuesta es el alcalde de Boca del Río, Miguel Ángel Yunes Márquez, el mejor calificado y el de Poza Rica, Sergio Quiroz Cruz, acusado de ser el más corrupto y el que obtuvo la puntación más baja. Pues ahora resulta que a petición de una maquinada denuncia de los diputados locales priistas solicitan que se le investigue al panista por un supuesto enriquecimiento ilícito.

A fin de disfrazar esta acción con todos los tintes políticos por tratarse de un funcionario de un partido de oposición y considerado enemigo personal del gobierno estatal, el fiscal del estado, Luis Bravo Contreras, minimizó la denuncia calificándola de ordinaria.

La regada de un dirigente

Un curso intensivo del quehacer político debiera ser obligatorio para el dirigente estatal del PRI, Alfredo Ferrari Saavedra, al apuntar que el PRD necesita un candidato como el senador Héctor Yunes Landa.

Desde cuándo el líder priista local puede tomar una decisión que solo le corresponde al legislador veracruzano priista y a los militantes del partido político del Sol Azteca. Además de ofender a Yunes Landa en su persona al denostar sus principios de añeja militancia del Revolucionario Institucional, de manera oficiosa infama al PRD al humillar a un instituto político de carecer de cuadros.

En los partidos numerosos no es posible que todos se conduzcan con prudencia. La política es quizás la única profesión para la que no se considera necesaria ninguna preparación.