Para conmemorar los aniversarios de la Independencia y Revolución de México, el estado de Veracruz estará de fiesta casi todo el año. Habrá inauguraciones de puentes, autopistas, edificios públicos, hospitales y escuelas. Amén de toda una serie de festejos y juegos deportivos.
Para estar a tono con este centenario y bicentenario las obras inauguradas y los eventos que se realicen llevaran los nombres alusivos a estos aniversarios y de personajes históricos relacionados con estos hechos.
Dentro de la idiosincracia del veracruzano existe una gran diferencia con los mexicanos de otras latitudes respecto a un particular espíritu de hacer celebraciones y de realizar para cualquier evento un sinnúmero de fiestas, de allí la existencia de carnavales, romerías, procesiones y mojigangas. Banquetes, desfiles y peregrinaciones para celebrar todas las festividades de vírgenes y santos. Sin faltar los cumpleaños para agasajar a caciques, líderes obreros, dirigentes campesinos o para cortejar a miembros de la clase política.
Aprovechar cualquier circunstancia para prolongar los días de descanso que permita el asueto y la holganza.
Así es el peculiar espíritu del veracruzano que lleva la bohemia y la fiesta por dentro.
Se llega al grado hasta de levantarle en vida una estatua al gobernador Fidel Herrera Beltrán en la ciudad de Poza Rica. Situación que entraña para el espíritu bullanguero del jarocho y la agudeza del cuenqueño dos alternativas. La primera como reconocimiento a su labor de gobernante o porque ya termina este año su gestión y se va. Por lo pronto es un buen pretexto para inaugurar alguna plaza donde se coloque la efigie en bronce del político de Nopaltepec.



No prescriben los delitos.

A partir del año 2004 existen importantes reformas al Código Penal del estado de Veracruz que impide que prescriban los delitos que cometen los funcionarios de cualquier nivel.
En el pasado a los tres años de terminada la gestión de un servidor público no se podía ejercer ninguna acción penal o administrativa por expirar el tiempo que permitía la ley.
Para evitar esta impunidad de la alta burocracia, el entonces gobernador Miguel Alemán implantó estas nuevas normas legales que disponen que ya no caduquen los delitos de abuso de poder, peculado, desvíos de recursos públicos y cualquier tipo de malos manejos de los recursos públicos.
Dentro de esa fecha quedaron incluidos los miembros del gabinete y alcaldes veracruzanos del último trienio del gobernador Miguel Alemán Velasco.
A partir de esa fecha había que tener mucho cuidado pero por lo visto les vale. Por lo tanto quedaron incorporados a este mandato los funcionarios del gabinete y presidentes municipales de la administración del gobierno de Fidel Herrera.
Ya no existe la prescripción que extinguía la acción de la justicia. Así pueden pasar décadas y si se descubre algún ilícito se podrá ejercer la acción jurídica. En el caso del gobernador Dante Delgado su detención amen de no existir delitos fue totalmente ilegal porque habían transcurridos los tres años que marcaba la prescripción.